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El neoliberalismo en su laberinto (II)

“¿Qué importa si el gato es blanco o negro, con tal de que cace ratones?” – Den Xiaoping

POR: CÉSAR A. CARO JIMÉNEZ     

En el contexto del neoliberalismo, el crecimiento económico de China ha sido uno de los fenómenos más sobresalientes en las últimas décadas. A medida que el país asiático se ha consolidado como una potencia mundial, su influencia en el mercado global ha ido en aumento. Esta situación plantea diversas interrogantes, tanto en lo que respecta a la forma como el gigante asiático, –con una economía centralizada, con objetivos quinquenales y bajo la conducción de un partido único que se autodefine como comunista–, viene utilizando el neoliberalismo en cuanto a que este último busca eliminar o reducir las regulaciones y controles gubernamentales sobre las empresas y el mercado, con el objetivo de fomentar la competencia y la eficiencia, en un marco de apertura de mercados y liberalización del comercio internacional a través de la eliminación de aranceles y barreras comerciales, favoreciendo la expansión de las exportaciones y la entrada de capital extranjero, maniobrando inteligentemente en su búsqueda de asegurar recursos naturales para sostener su crecimiento.

En dicho sentido, la posibilidad de que China intente adquirir en algún momento la empresa minera Southern Peru, una de las mayores productoras de cobre del mundo, no parece descabellada. La creciente demanda de este metal por parte de la industria china podría llevar al país asiático a buscar fuentes de suministro más seguras y ampliar su control sobre la cadena de producción en la cual intenta tener la hegemonía, a tal punto que en el caso peruano entre el 2007 y el 2023 viene invirtiendo 26,120 millones de dólares.

La adquisición de Southern Peru por parte de China tendría implicaciones significativas. Por un lado, reforzaría la presencia china en el mercado del cobre, lo que podría desestabilizar los precios internacionales y afectar a otros actores del sector. Por otro lado, podría poner en riesgo la soberanía nacional de Perú, al ceder el control de un recurso estratégico a una potencia extranjera.

Además, la compra de Southern Peru por parte de China pondría en evidencia las limitaciones del modelo neoliberal en términos de regulación y control de la inversión extranjera. Si bien el neoliberalismo promueve la liberalización de los mercados y la competencia sin restricciones, la entrada de un actor tan poderoso como China en un sector estratégico como la minería pone de manifiesto la vulnerabilidad de los países frente a la influencia extranjera.

En este contexto, es crucial que los gobiernos y las instituciones internacionales reflexionen sobre las implicaciones de la globalización neoliberal y establezcan mecanismos de control que garanticen la soberanía de los Estados y la sostenibilidad de los recursos naturales. La posible adquisición de Southern Peru por parte de China es solo un ejemplo de los desafíos que plantea el neoliberalismo en un mundo cada vez más interconectado y desigual. La respuesta a estos desafíos dependerá de la capacidad de los países y las empresas para adaptarse a un entorno en constante cambio en el cual China viene teniendo un papel principal.

Papel, que algún momento podría hacer que una empresa china presente una “oferta hostil” para adquirir acciones de Southern Copper Corporation a través de una “oferta hostil” en la bolsa de valores. (Una “oferta hostil” ocurre cuando una empresa intenta adquirir acciones de otra empresa sin el consentimiento o apoyo de la junta directiva o de los accionistas principales de la compañía que se desea adquirir.  Cabe recordar que el Grupo México adquirió a la SPCC utilizando dicho mecanismo, ofertando una suma cercana a los 2000 millones de dólares).

En teoría, cualquier empresa puede hacer una oferta para adquirir acciones de Southern Copper Corporation en la bolsa de valores, incluso mediante una oferta hostil. Sin embargo, es importante tener en cuenta que este tipo de ofertas pueden ser complicadas y estar sujetas a regulaciones y restricciones específicas en cada país y mercado de valores.

Además, es probable que, si una oferta hostil fuera presentada, la junta directiva de Southern Copper Corporation y otros accionistas importantes de la compañía tomarían medidas para defenderse y proteger sus intereses. Esto puede incluir medidas como solicitar regulaciones de los entes reguladores o implementar estrategias de dilución de acciones para frustrar la adquisición hostil.

En resumen, aunque en teoría es posible comprar acciones de Southern Copper Corporation en la bolsa de valores, sobre todo si la oferta supera ampliamente el valor en libros de la empresa, es posible que los accionistas de la misma consideren seriamente aceptarla. El valor en libros de una empresa es el valor de sus activos según sus estados financieros, y si la oferta supera este valor, podría indicar que los accionistas recibirían un precio por sus acciones que es más alto de lo que la empresa vale teóricamente en papel.

Además, los accionistas también deben tener en cuenta las perspectivas de crecimiento y el potencial de la empresa en el futuro. Si se espera que la Southern Copper Corporation tenga un buen desempeño y permanezca sólida en el mercado a largo plazo, pueden preferir mantener sus acciones a pesar de una oferta que supere su valor en libros.

En última instancia, la decisión de aceptar o rechazar una oferta que supere ampliamente el valor en libros de una empresa depende de la evaluación de los accionistas sobre los beneficios y riesgos a largo plazo, así como de sus objetivos y estrategias de inversión, aspectos todos en el cual el Perú y la región no tienen ningún papel que jugar, lo que no impide  que los estados como el peruanos deban buscar formas de controlar y regular las actividades de las empresas privadas y de otros países en su ámbito geográfico y económico para evitar que acumulen demasiado poder. Esto podría incluir la implementación de regulaciones más estrictas y la cooperación internacional para cerrar lagunas legales, que han permitido, por ejemplo, que el brazo financiero del Banco Mundial vendiese acciones de Quellaveco que a lo más le costaron 50 millones de dólares, en más de 900 millones de dólares a Mitsubishi.

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