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¿El tren bioceánico central, oportunidad perdida?

Lo cierto es que se ha perdido valioso tiempo y algo que no se repetirá en muchísimo tiempo, contar con el apoyo de un Presidente de la región. A diferencia del dinero, el tiempo no puede ahorrarse para aprovecharlo en otro momento.

POR: JESÚS LIENDO BELTRAMÉ      

En julio del 2016  el Ing. Martin Vizcarra Cornejo,  asumió el Ministerio  de Transportes y Comunicaciones y los pobladores de las regiones del sur del Perú y de la provincia de Ilo en particular, nos ilusionamos con el proyecto del Tren Bioceánico Central;  cuyo paradero final sería el puerto de Ilo, por el desarrollo económico que generaría especialmente para la provincia de Ilo, más aún cuando en octubre del 2016,  durante la reunión en  Santa Cruz – Bolivia, en la que el ministro Martín Vizcarra expresó su apoyo al proyecto Ferroviario Bioceánico Central. Bastó que el 23 de marzo del 2018 el Ing. Vizcarra asumiera la Presidencia de la Republica, para sentir la seguridad que el proyecto tendría viabilidad y se haría realidad.

Hace un poco más de un año, para ser exactos el 25 de junio del 2019, aquí en la provincia de Ilo,  se llevó a cabo el encuentro Presidencial Perú – Bolivia y el V Gabinete Binacional Perú-Bolivia, concluyendo con la firma de  varios acuerdos, entre los que debo destacar entre otros el #16 “Coincidieron en la importancia estratégica del proyecto de Corredor Ferroviario Bioceánico de Integración (CFBI) para el desarrollo e integración de la región, comprometiéndose a impulsar y concluir, en el más breve plazo posible, el estudio integral de factibilidad. En este marco, el gobierno de Bolivia resaltó el esfuerzo realizado por el Perú en el desarrollo de los términos de referencia” luego de ello el proyecto del Tren Bioceánico Central se quedaría sin combustible.

Seguramente la excusa perfecta será que el país tuvo y continúa enfrentando usa serie de problemas, tratando de justificar la desidia u olvido no solo del Gobierno Central, sino también el desinterés de las autoridades locales y regionales.  Lo cierto es que se ha perdido valioso tiempo y algo que no se repetirá en muchísimo tiempo, contar con el apoyo de un Presidente de la región. A diferencia del dinero, el tiempo no puede ahorrarse para aprovecharlo en otro momento.

Hace unos días, en plena pandemia el Ministro Joao Carlos Parkinson coordinador general de Asuntos Económicos de la Cancillería de Brasil y el Intendente de la región de Antofagasta Edgar Blanco Rand, refrendaron un acuerdo de complementación económica entre la región de Antofagasta en Chile y los estados de Campo Grande y Mato Grosso do Sul de Brasil, para activar corredores viales post pandemia.

El acuerdo es mucho más ambicioso, pues incluye activar zonas de apoyo logístico, compartir información y datos asociados de carga exportable de ambos países esto para viabilizar operaciones de comercio internacional conjuntas. La intención de los estados de Brasil es traer componentes del Asia e implementar una zona industrial.

Asimismo, están trabajando para atraer cargas e inversiones de los países asiáticos, a fin de impulsar el desarrollo de cadenas regionales y productos brasileños de exportación que puedan agregar valor local, coordinando protocolos de cooperación logística entre Campo Grande y Mato Grosso do Sul y Antofagasta.

Mientras nuestras autoridades y organizaciones civiles están con los brazos cruzados esperando no se sabe que, nuestros vecinos nos llevan la delantera, aprovechando al máximo las oportunidades que se les presenta, trabajando proyectos post pandemia. A este plan el gran proyecto del Tren Bioceánico Central quedará como una gran ilusión.

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