POR: JORGE ACOSTA ZEVALLOS
Constantemente estamos afectados por las crisis internacionales en el precio de los combustibles, esta vez lo es por la Guerra de Ucrania – Rusia que disparo al máximo la inflación en el mundo y en especial en nuestro país. Contradictoriamente somos un país que tiene gas y no se beneficia de esta molécula.
Por otro lado, importamos petróleo a precios muy altos y en dólares en un 80% porque solo producimos internamente menos del 20%. En consecuencia, la venta de gasolina y el balón de gas subieron exorbitantemente afectando las tarifas del transporte y el costo de la cocina familiar con el gas derivado del petróleo (GLP) que contiene el balón de gas.
Si bien, la propuesta es Masificar el gas en todo el territorio nacional, ella sigue siendo un cuento de larga data. Este es el caso del sur de país que teniendo el gas de Camisea con diferentes pozos y reservas de gas natural solo beneficia a la capital de la Republica y a otros países a través de las exportaciones.
Y la pregunta es la de siempre, ¿por qué no podemos masificar el consumo de gas natural?, que si lo estuviera estaría siendo distribuido a las casas mediante tuberías semejante al del agua, que los vehículos también lo consumirían y lo utilizaríamos como insumo para una petroquímica para producir por ejemplo fertilizantes como la urea, y lo importantes es que es más barato porque no depende de la coyuntura internacional.
Y la respuesta es también la de siempre, los gobiernos pasados no tuvieron la visión de priorizar la economía nacional y por contrario fueron corrompidos por los favores otorgados; segundo, que los recursos del gas una vez puestos en superficie de tierra son propiedad de sus explotadores; tercero, fracaso el gasoducto sur peruano (GSP) también por el caso de Odebrecht lo desmasifico.
Se intentó masificar el gas natural en el Sur Oeste del Perú con los departamentos de Arequipa, Moquegua, Tacna y la provincia de Ilo a través del denominado Gasoducto virtual que se inicia en la planta de Melchorita donde se licua y es trasportado en Camiones cisternas al sur oeste y depositado en las plantas de regasificación y distribuidos a través de redes de ductos a los domicilios, grifos y centros industriales.
El Estado firmó el, 31 de octubre de 2021, un contrato de concesión con FENOSA que después se convirtió en Naturgy S. A. para ese propósito con periodo inicial de 21 años prorrogables a 60 años. Todo indica que la contratista tenía puestas sus esperanzas en el Gasoducto Sur Peruano (GSP) para proveerse del insumo de gas natural y tener rentabilidad, sin embargo, ante el fracaso de este el 2018 Naturgy S.A. rompe el contrato y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) encarga a Petro Perú S. A. con el DS 029-2020-EM la administración de la concesión sur – oeste del Sistema de Distribución del Gas Natural.
Posteriormente el Ministerio de Energía y Minas (MINEM) publica el DS 004-2021-EM en que autoriza el uso de fondos del FISE para la masificación del uso del gas natural y financiamiento de las conexiones de consumidores, sistemas de transporte y distribución de conexiones domiciliares y conversión vehicular.
Ante este panorama le preguntamos a Petro Perú en la mesa de dialogo con el gobierno local y sociedad civil de la provincia de Ilo y también en el Foro sobre la Masificación del Gas del Congresista Cutipa; ¿Cuándo reinician la masificación del gas natural en el sur oeste del país sobre el cual están encargados? Y la respuesta fue contundente, no tenemos esa función, el DS 029 solo nos permite ser administradores de lo avanzado.
Confrontamos adversamente afirmando que el DS 004 y RM 154-2022-EM/DM auspician la masificación y la respuesta fue complementaria ¡!¡Se tiene que ampliar el DS 029-EM especificar nítidamente las funciones y lograr el financiamiento para continuar la masificación del gas natural en el sur del país!!! A manera de conclusión, estamos en los mismo, no hay masificación en el sur – oeste del país, las normas están confusas como lo es el MINEM, de otro lado en los gobiernos locales y regionales existe un desinterés e indiferencia sobre la carestía de la vida y las alternativas de emergencia.
Agregamos que lo avanzado en masificación es muy poco pues solo se cuentan con 6 plantas de regasificación, 11 camiones cisternas, solo 12,815 familias atendidas, 400 km de rede atendidas. 19 industrias y 25 comercios. Como dicen algunos ¡Pagan elevados precios por el gas derivado del petróleo importado teniendo gas natural en la puerta de su casa!
