La segunda convocatoria para la subasta y adjudicación de la buena pro de los restaurantes de la playa Pozo de Lisas fue declarada desierta, generando preocupación entre las autoridades locales.

El regidor Edgar Puma lamentó la falta de postores y criticó la demora en el proceso de convocatoria, además el mantenimiento realizado a última hora.

“Estamos como el perro del hortelano: la municipalidad ni los habilita ni permite que otros los alquilen. Es lamentable que la principal playa de Pozo de Lisas tenga cinco restaurantes cerrados. Esta es una situación que no deseábamos”, expresó Puma.

El regidor señaló que, aunque se intentó acelerar la subasta, los restaurantes no cuentan con las condiciones adecuadas, lo que desincentiva la participación de posibles arrendatarios.

Además, cuestionó a los funcionarios de la Municipalidad Provincial de Ilo (MPI) por no considerar las perspectivas de los empresarios. Según Puma, no es razonable exigir pagos de alquiler y garantías hasta octubre, cuando la temporada de veraneantes termina en abril.

Finalmente, calificó estas decisiones como equivocadas y aseguró que han sido la causa de que los cinco restaurantes de Pozo de Lisas permanezcan cerrados, perjudicando tanto a los empresarios como a la población de Ilo.