En sesión de Concejo Municipal Provincial de Islay del 12 de mayo de 2020, se trató el “Recurso de Reconsideración en contra del Acuerdo que aprueba el Plan de Desarrollo Local Concertado de la Provincia de Islay 2018 – 2030”, recurso impugnatorio interpuesto por las regidoras de minoría y oposición Lic. Martha Canqui Pomalequi y Lic. Zulema Quispe Zapana. En el debate, de nueve regidores, solo intervinieron tres, las proponentes y el Ing. José Ignacio Paredes Sánchez, oficialista del grupo de mayoría; los demás permanecieron mudos.
INTERVENCIÓN OFICIALISTA
El Reg. Paredes, dijo: “guste o no guste la actividad minera está iniciando un procedimiento aquí y también se menciona que está en una etapa de exploración hecho que ya está desfasado pues en la actualidad está en una etapa de construcción” (se está refiriendo al proyecto minero Tía María, tema sensible, tendenciosamente mencionado en el instrumento de gestión). Y, pretendiendo haber estudiado, el desorientador Plan de Desarrollo Local Concertado de la Provincia de Islay 2018 – 2030 (aprobado irresponsablemente), denota desubicación política, falta de identidad provincial y desinformación técnica.
TÍA MARÍA: “LES GUSTE O NO”
Luego, manifestó: “que la actividad minera (Tía María) se puede o no dar, ¿es algo malo?, si esa es la realidad de la provincia de Islay, les guste o no, esa es la realidad y no se puede obviar, es por ello que al hacerse el plan se tuvo que considerar”; volvió a decir: “el plan señala que se ha consignado que la actividad minera (Tía María) está en una etapa de exploración cuando ya se está en una etapa de construcción”. Dándose cuenta que se estaba yendo de boca en su afanoso “realismo”, hace una hipócrita reflexión “aclara que ellos al aprobar el documento no están diciendo si Tía María va o no va”. Lo expuesto por el regidor está en el “Acta de Sesión Ordinaria Nº 05 del 12 de mayo del 2020”, elaborado por Secretaría General de la Municipalidad Provincial de Islay, aprobado en sesión de concejo del 29 de mayo de 2020, sin ninguna observación del citado concejal.
LISTOS PARA TÍA MARÍA
Me alegró la aparición de Prensa Regional, memoria de la provincia, ahí se registran: hechos, conductas y declaraciones de actores. En su edición del 06 de junio de 2020 (pág. 8), se registra la nota: “Así lo dio a conocer durante las conferencias del IIMP en los Jueves Mineros. Raúl Jacob: Estamos listos para concretar Tía María”; en el desarrollo de la noticia, leemos: “El eco. Raúl Jacob, vicepresidente de Finanzas de Southern Copper y Southern Peru (SPCC), informó que la empresa minera esta lista para concretar la inversión minera de $ 1400 millones del proyecto Tía María en la provincia de Islay”. “En Southern Peru estamos listos para concretar una inversión de $ 1400 millones a través de la construcción del proyecto de cobre Tía María que generará 9 mil puestos de trabajo –directos e indirectos- por un período de dos años y, posteriormente, se mantendrán 5,400 puestos de trabajo en similares condiciones a las de la etapa de construcción, así lo dio a conocer durante las conferencias del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), denominadas, Jueves Mineros”.
DICHOS SE COMPLEMENTAN
Es evidente, las declaraciones de José Paredes y Raúl Jacob, se complementan, en palabras del regidor “¿es algo malo?” “esa es la realidad” “les guste o no”. Del proyecto Tía María, ambos hablan: “está en etapa de construcción”, “estamos listos para concretar la construcción”. Un auténtico luchador social, advirtió: “Dios me libre de los halagos de la derecha, significaría que he dejado de ser de izquierda”. Parafraseándolo, decimos: “Dios me libre de las coincidencias con los grupos de poder económico, significaría estar de espaldas a la realidad de mi pueblo”. Por eso, para ser autoridad (alcalde o regidor), se debe tener: talento político, capacidad técnica, honestidad económica y liderazgo organizacional.
NECESARIA ACLARACIÓN
Tía María, no está en etapa de construcción -a pesar de la Licencia de Construcción otorgada por el Gobierno de Martín Vizcarra-, está administrativamente en “pausa” (interrupción, hasta obtener licencia social), porque así lo acordaron consciente y voluntariamente, la empresa Southern Peru con el Gobierno de Ollanta Humala.