POR: MIGUEL CÉSPEDES RODRÍGUEZ
Una vez más se tienen que ver caras tristes, porque miles de jóvenes no ingresaron a la Universidad Nacional de Moquegua (UNAM). Y en muchos casos no es que no tengan capacidad, sino que no hay vacantes. Y no hay vacantes porque tanto docentes, administrativos y autoridades no lo solicitan. No es de su interés. Los docentes quieren más sueldo, los administrativos también y las autoridades quieren quedarse todo el tiempo posible en tanto cobren sus jugosos sueldos.
Muchas amas de casas, padres de familias estuvieron esperanzados que sus hijos ingresen a la universidad, pero triste es la realidad que con 85 millones de presupuesto solo tenga 2500 alumnos, cuando la Universidad José Carlos Mariátegui (UJCM) con 40 millones de soles de presupuesto anual, atendían a 12 mil alumnos. Hoy todos o casi todos los estudiantes egresados de secundaria debería estar en la UNAM, pero es la insensibilidad de sus autoridades, docentes y administrativos que no permiten satisfacer la demanda por universidad de los egresados moqueguanos. Advertidos estamos.
El análisis de la tabla proporcionada indica la cantidad de postulantes e ingresantes a la Universidad Nacional de Moquegua (UNAM) en marzo de 2024. Con un total de 2257 postulantes y solo 239 ingresantes, hay una gran cantidad de aspirantes que se quedan sin ingreso.
Se observa una demanda excepcionalmente alta por la carrera de Medicina, con 778 postulantes y solo 30 vacantes, dejando a 748 postulantes sin ingreso. La relación postulante/ingresante en Medicina es la más alta con 26.
En el caso de Ingeniería Pesquera Ilo, no hay ingresantes registrados, hay decepción por esta carrera dado que en el aparato empresarial es inexistente y los que trabajan no tienen muchas perspectivas. De allí que los jóvenes no quieran seguir esta carrera, y hoy se constituye en la más cara de la UNAM. ¿Dónde están los docentes con visión empresarial? Algunos inclusive quieren abandonar la carrera ¿temen el cierre de esta carrera y por eso quieren irse a otras carreras?
La carrera de Ingeniería Civil muestra una relación de 15 postulantes por vacante, lo cual es un indicador de alta competitividad. Por otro lado, Ingeniería Minas MN también muestra una alta demanda con 28 ingresantes y 157 aspirantes que se quedan sin plaza.
Existe un desequilibrio significativo entre la cantidad de postulantes y las vacantes ofrecidas en casi todas las carreras, lo que sugiere que la universidad podría evaluar la posibilidad de aumentar la oferta de vacantes para satisfacer la demanda.
Podría ser recomendable que la UNAM considere estrategias como aumentar la infraestructura y los recursos, revisar el proceso de admisión para identificar si existen barreras innecesarias, y promover carreras con baja demanda para equilibrar la distribución de postulantes.
En conclusión, la UNAM enfrenta el desafío de administrar una demanda de admisión que supera significativamente la oferta de vacantes en muchas de sus carreras. Es vital que la universidad considere esta información para planificar y tomar decisiones estratégicas que permitan maximizar las oportunidades de ingreso para los postulantes, manteniendo la calidad y la sostenibilidad de los programas académicos. y no perjudiquen a la juventud moqueguana.