POR: MIGUEL CÉSPEDES RODRÍGUEZ
De acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática – INEI – al sumar los encuestados que no tienen «nada» de confianza (41.8%) y los que confían «poco» (40.3%), se obtiene un 82.1% de personas con desconfianza en el Gobierno Regional. Esta cifra es considerablemente alta y refleja una falta de credibilidad generalizada en la institución, lo que puede deberse a la percepción de ineficiencia, corrupción y falta de transparencia en su gestión.
De acuerdo a la encuesta, a julio de este año, solo el 10% de los encuestados cree que la confianza en el Gobierno Regional es «suficiente». Aunque no es un número insignificante, representa una minoría en comparación con el grupo mayoritario que muestra desconfianza.
La confianza en el Gobierno Regional de Moquegua es muy baja, con más del 82% de los encuestados manifestando tener poca o ninguna confianza en esta institución. Esto representa un desafío importante para la gobernabilidad y la legitimidad de sus acciones.
Los datos generan la escasa credibilidad de un gobierno regional que no hace mucho para revertir el proceso. Esto confirma la teoría del descontrol social producto de una burocracia que detenta el poder, pero para servirse de ella, de la caja fiscal, lo cual afecta al estado de bienestar que se supone es el objetivo del estado constitucional.
