La presidenta Dina Boluarte señaló que el legítimo derecho a la protesta no puede socavar las bases de institucionalidad y la convivencia pacífica.
Durante su presentación ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), señaló que el Gobierno peruano lamenta la irreparable pérdida de vidas humanas durante las últimas protestas y que estas no pueden quedar impunes.
La jefa de Estado manifestó que son conscientes de las demandas insatisfechas de la población en más de 200 años de vida republicana, las cuales han motivado las movilizaciones en diferentes partes del país.
“Ese legítimo derecho de protesta, no obstante, no puede significar que se permita socavar la institucionalidad democrática y la convivencia pacífica entre peruanos”, sostuvo la presidenta Dina Boluarte.
De otro lado, señaló que su Gobierno presentó el proyecto de adelanto de elecciones ante el Congreso para que la población renueve sus autoridades con la más amplia apertura democrática y además porque es un pedido de quienes están protestando.
“Estamos decididos a concretar ese compromiso para brindar a los más de 33 millones de peruanos y peruanas la oportunidad de decidir su destino, tarea en la cual deben participar todas las fuerzas políticas y sociales, pues está en juego el futuro y la estabilidad de nuestro país”, expresó la mandataria.
Boluarte Zegarra afirmó que en el Perú se respeta el derecho a la protesta pacífica, pero enfatizó que el Estado tiene el deber de velar por la seguridad y por el orden interno en salvaguarda de los 33 millones de peruanos.
“Mi gobierno actuará siempre en el marco de las facultades que le concede Constitución y las leyes para defender la vida, la salud y la integridad de todas y todos los peruanos. No nos podemos desviar de ese objetivo”, señaló.
La mandataria expresó su dolor por la pérdida de vidas ocurridas durante las manifestaciones sociales en distintas regiones del país.
Ante ello, dijo que, de haberse cometido excesos en el uso de la fuerza para el restablecimiento del orden interno, se investigará y se llevará a la justicia a quienes resulten responsables. “Esperemos que la justicia siga su curso y establezca responsabilidades pronto”, manifestó.
Asimismo, mencionó que el gobierno ha creado una comisión multisectorial que apoyará a los familiares de los fallecidos y heridos en las movilizaciones con un enfoque integral.
La jefa de Estado señaló que el Perú atraviesa por una situación compleja y que la crisis política puede transitar por el derrotero de la violencia, la muerte y la destrucción o puede resolverse en paz, diálogo y democracia, a través de elecciones libres, democrática y con todas las garantías.
En este punto, enfatizó que serán los ciudadanos quienes, sin injerencia, ni violencia, decidan el futuro del Perú. «Creo que el Perú tiene derecho a tejer su propia historia», afirmó.
“Ayuden al Perú a encaminar su destino a través de elecciones libres, elecciones que he pedido al Congreso que se aprueben con la mayor prontitud”, invocó ante el Consejo Permanente de la OEA.
“No me voy a rendirme frente a grupos autoritarios que quieren imponer salidas que no forman parte de nuestro ordenamiento constitucional, ni de la tradición democrática que esta organización cultiva con tanto celo”, afirmó.
La mandataria agradeció la solidaridad de los países miembros de la OEA, así como del Papa Francisco, lo cual, indicó, demuestra que el Perú no está solo.