POR: BETO LAJO PAREDES
La tímida Unión Europea está fuera de las negociaciones para el fin de la guerra de Rusia y Ucrania, por decisión de Trump y Putin; el invasor de la ex república soviética, se allana a conversaciones de paz ¿por táctica o cansancio? Inglaterra, está equidistante de las determinaciones de la Casa Blanca, y sus efectos en el viejo mundo, porque, no le alcanzan, y, está retirado de ese Estado continente. El Foro de Sao Paulo, el Alba chavista y el Grupo de Puebla, no proponen ninguna alternativa, a las medidas ejecutivas del presidente norteamericano: imponer aranceles, soslayar los TLC. Hasta los BRICS, siguen sin responder a las advertencias de Trump de implantarles el 100% de aranceles si se atreven a crear otra moneda internacional diferente al dólar.
En el conflicto judío – palestino, del medio oriente, el reciente presidente de EE.UU., abiertamente, se ha puesto de lado del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, incluso, enérgicamente, le ha pedido al grupo Hamás, cumpla los acuerdos de liberación de rehenes, con la amenaza de desatarse el infierno, si hace lo contrario.
En el Parlamento español, representantes del derechista Partido Popular, le enrostraron al presidente Pedro Sánchez, del izquierdista Partido Socialista Obrero Español, de ser el culpable que EE.UU. imponga a España aranceles, por llevarse mal con Trump, a diferencia de la canciller italiana Georgia Meloni que, por caerle bien a Trump, éste no va a poner aranceles a productos de Italia. En Sudáfrica, los habitantes blancos, se han manifestado públicamente, en apoyo a Donald Trump, han denunciado racismo del Gobierno Sudafricano contra la minoría blanca, como pidiendo ayuda al gobernante de Norteamérica.
El mundo, de la Guerra Fría de EE.UU. – ex URSS (post II Guerra Mundial), transitó por el Consenso de Washington (años noventa), luego, a la efímera e incipiente Multipolaridad (primeras décadas del presente siglo XXI); ahora se asiste a la Guerra Comercial EE.UU. – China, y al retorno de la unipolaridad estadounidense; se ha retirado de la Organización Mundial de la Salud, del Acuerdo de París, está motivando que las occidentales empresas multinacionales instaladas en China, regresen a EE.UU., se ha quejado del supuesto control de China sobre el Canal de Panamá, y ha conminado al gobierno panameño a no cobrar a los barcos con bandera norteamericana por el paso de la vía interoceánica.
El presidente republicano, con sus anuncios estridentes, emisión de disposiciones, rechazo a programas de ayuda internacional, declaraciones imperiales; está causando revuelo en el mundo. Habla del “estado profundo”, no es otra cosa que la burocracia federal con poderes sin haber sido elegidos por el pueblo, justificando, de esta manera, cierre de oficinas, reducción de presupuestos, despidos de empleados, etc., a la vez ha iniciado masivas cacerías de migrantes indocumentados, expulsándolos a sus países; finalmente, mira a Latinoamérica con desdén e ignora al continente africano.
Reconstruyamos el “Interamericanismo democrático sin imperio”, tesis hayista realista y vigente; una ocasión para que la Organización de Estados Americanos (OEA), la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y el Parlamento Latinoamericano (Parlatino), se reúnan en conferencia continental con EE.UU., para actualizar postulados políticos de consolidación de la libertad y modernización de la democracia, como elaborar programas de desarrollo, inspirados en los principios de que EE.UU. e Indoamérica, se necesitan recíprocamente; además, en el “apotegma – guía”: “Ningún país subdesarrollado podrá salir de su retraso, sin la ayuda económica y tecnológica de los países desarrollados” (O.C, de Víctor Raúl Haya de la Torre, tomo 1, pág. XLII).
Algunos dirán, eso es utopía, sin darse cuenta que estamos atrapados en distopía en estos momentos, por los impactos del narcotráfico, economías ilegales, incremento de la delincuencia común, crimen organizado y transnacional.
Con este artículo rindo mi homenaje al Día de la Fraternidad y al 130 nacimiento de Víctor Raúl Haya de la Torre del 22 de febrero de 2025.