POR: ENRIQUE RIVERA SALAS (PERIODISTA COLEGIADO)   

Para realizar esta información periodística, llevé a cabo un trabajo de varios meses de investigación, el cual hice con profundo interés, para que todos los mollendinos, y quienes no residen en nuestro querido Perú, puedan conocer esta historia y sirva de ejemplo a nuestras futuras generaciones.

Esta semblanza se la dedico a toda la juventud en general de nuestra querida ciudad, más conocida como “Puerto Bravo”.

1912

Nace el 11 de marzo en Mollendo (aunque otros autores señalan que nació en Sicuani). Sin embargo, no existe documento oficial ni prueba alguna, pero “Carpayo” lo dijo mil veces: “Yo soy mollendino”.

1925

A los 14 años ganó los “Juegos Continentales”.

1926

Participó a los 18 años, compitiendo en los Juegos Olímpicos de Holanda.

1932

Representó al Perú en las Olimpiadas de Los Ángeles (EE. UU.).

1934

Obtuvo doble triunfo en el Sudamericano de Buenos Aires, en los estilos de 100 y 200 metros espalda.

1935

En Río de Janeiro logró batir el récord sudamericano en los 100 metros espalda.

1936

Asistió a las Olimpiadas de Berlín, junto al “Brujo” Edgard, pero no participó debido a irregularidades con la Selección Peruana de Fútbol, que integraban Lolo Fernández y Alejandro Villanueva (“Manguera”), ante una disposición de Hitler. El presidente peruano, Benavides, ordenó el retiro completo de la delegación peruana y su retorno al país.

1945

El 29 de enero cruzó a nado el Río de la Plata en tiempo récord de 22 horas y 55 minutos, desde Colonia (Uruguay) hasta Buenos Aires (Argentina). Esta hazaña la repitió en 1977 y 1982, a la edad de 45 años.

1947

Fue el primer nadador sudamericano que cruzó el Canal de la Mancha, entre Francia e Inglaterra, uniendo el Atlántico y el Mar del Norte.

1948

El 28 de julio consiguió cruzar el Estrecho de Gibraltar en 9 horas y 15 minutos (luego lo hizo en 1977, a los 67 años, y en 1987, a los 77 años). Cabe resaltar que el Estrecho está formado por el histórico Peñón de Gibraltar, sobre el Atlántico y las costas de España (entre olas y corrientes, 18 kilómetros de distancia).

1948

El gobierno peruano le otorgó la Orden del Sol en grado de Gran Maestro, distinción reservada para personajes ilustres.

1951

Unió Rosario de Santa Fe y Buenos Aires nadando por el Río Paraná.

1952

Recibe del gobierno, a través del Instituto Peruano del Deporte (IPD), los Laureles Deportivos del Perú, y su nombre fue perennizado y grabado en lo más alto del Estadio Nacional.

1977

Cruza nuevamente el Estrecho de Gibraltar a los 67 años.

1986

Un calambre le impidió concretar su tercer intento de cruzar el Canal de la Mancha, entre Francia e Inglaterra.

1986

El 7 de marzo llegó al Terminal “Rodríguez Ballón” el tritón de América, acompañado por su entrenador René Alcántara, Doña María Isabel Bustamante, su dietista y su representante Hilda Missaglia. Edgard Pastor Paredes, coordinador provincial del IPD, invitó al legendario “Carpayo” y a su comitiva a Mollendo para rendirle homenaje en su pueblo natal.

En Mollendo, la Municipalidad Provincial de Islay, el IPD y el Club “Daniel Carpio” le rindieron un cálido homenaje con un programa especial en la Piscina Municipal, donde además hizo una demostración especial de su estilo propio llamado «la bicicleta». Cabe señalar que Daniel Carpio también realizó una demostración en la “Aguadita”, acompañado por el ex subprefecto de la Provincia de Islay, Ruiz de Somocurcio.

El tritón de América se quedó perplejo cuando vio a los chicos del Barrio Islay lanzarse desde más de 40 metros de altura, desde la baranda más alta de la antigua “Aguadita”, a la poza donde él hizo las demostraciones. “Carpayo” quedó admirado por las llamadas “clavadas” que hicieron los muchachos del barrio. Tuve el honor de estar presente acompañando a Daniel Carpio.

En la ciudad de Arequipa, el IPD le entregó el “Misti de Oro” y la Liga de Natación le rindió homenaje con un festival acuático en la Piscina “Pedro P. Díaz” de Tingo, donde Carpayo hizo una demostración de estilos a los jóvenes deportistas.

En la ciudad de Lima, el Instituto Peruano del Deporte, cuyo presidente era Yvan Dibos, lo distinguió en el Salón de las Américas del Estadio Nacional, entregándole una placa recordatoria. Daniel Carpio, luego de este reconocimiento, expresó: “Estoy agradecido a mi país por esta distinción”.

El tritón de América, como también se le llamaba en todas sus visitas, recibió homenajes y declaró que uno de los objetivos de su viaje de Argentina a Perú era reunir la suma de diez mil dólares para cruzar nuevamente el Canal de la Mancha por tercera vez, y que esta travesía requería un millón de soles. Para ello, se estaba haciendo una gestión especial directamente con el presidente de la República, Dr. Alan García Pérez (en su primer gobierno), con la intención de que la travesía se realizara el 28 de julio como homenaje al aniversario patrio.

Es necesario señalar que el viaje de Argentina a Perú, y todas sus visitas, fue asociado por el Diario “La Crónica” de Lima.

También es necesario dar a conocer que desde el año 2004, cuando tenía 94 años, con asombrosa lucidez, luchó contra el mal que lo aquejaba, un dolor horrible en su pierna derecha; sufría de artrosis y siempre mantenía una terapia de relajación que lo ayudaba a disipar los momentos de dolor.

El viernes 18 de marzo del 2005, en el Puerto del Callao, la Municipalidad del Callao, a través de su alcalde Alex Kouri, le entregó la Medalla de la Ciudad en honor a la gran gloria peruana de la natación. En esta ocasión, Daniel Carpio retornó al país después de 30 años de residir en Buenos Aires, Argentina. Durante este homenaje del pueblo chalaco, manifestó: “Mi nombre es Daniel Carpio, mi otro nombre es ‘Carpayo’”. En ese día, que fue la última vez que llegó al Perú, también dijo: “Ya el cartel de mi vida está terminado”, y luego, con gran emoción, a los 95 años, expresó: “Me faltan unos 20 años”. Una risa tierna se apoderó de la reunión, que fue convocada por el Instituto Peruano del Deporte.

El autor de esta nota tuvo el honor de conocerlo y conversar con él en la “Aguadita”. Él siempre decía: “Yo soy mollendino y siempre lo llevaré en mi corazón”.

Esta vez no podemos demostrar la partida de nacimiento porque, según la historia de Mollendo, el 2 de abril de 1912 se produjo el mayor incendio en Mollendo (se incendiaron 7 manzanas de casas y edificios). El edificio del Concejo Provincial de Islay desapareció y los documentos de inestimable valor (Registros Civiles de la Municipalidad Provincial de Islay) se destruyeron.

Ahí nos quedamos.