Las actividades pesqueras industriales que se desarrollan en la Reserva Nacional Dorsal de Nasca no suponen una amenaza para los ecosistemas marinos si se respetan las normas y se mantiene el control adecuado, según concluyó el Centro de Desarrollo y Pesca Sustentable (CeDePesca) en un reciente pronunciamiento.
OPERACIONES FUERA DE ZONAS SENSIBLES
La reserva —ubicada en aguas profundas del Pacífico sur peruano— cuenta con una zonificación que permite la pesca en la franja superior, donde históricamente operan flotas artesanales e industriales.
“La sostenibilidad pesquera no es antagónica a la conservación”, afirmaron Gabriela McLean, Frank Altamirano, Miguel Romero y Ernesto Godelman, voceros de CeDePesca.
RECHAZAN RESTRICCIONES INJUSTIFICADAS
CeDePesca subrayó que operaciones como la pesca de perico o jurel se realizan muy por encima de los 1000 metros, sin afectar la biodiversidad protegida.
Además, señalaron que imponer nuevas restricciones a las flotas nacionales —cuando operan dentro del marco legal— sería una medida injustificada.
LLAMADO A DECISIONES TÉCNICAS
Finalmente, la organización hizo un llamado a priorizar el análisis científico sobre las presiones políticas en la toma de decisiones.
DATO:
La Dorsal de Nasca, creada en 2021, presenta biodiversidad profunda y dinámica tridimensional. Su zonificación comprende una Zona de Protección Estricta (1000–4000 m) y otra de Aprovechamiento Directo (0–1000 m), usada históricamente para pesca.