“La coloración del río Tambo no es normal. El río sigue contaminado”, declaró la ingeniera Magdanee Salinas Medina, subgerente de Gestión Ambiental de la Municipalidad Provincial de Islay, durante una constatación policial realizada este miércoles en el sector del puente Pampa Blanca y del puente nuevo de la Costanera. La verificación ambiental contó con la presencia del personal de la comisaría de La Curva, como parte de las acciones para documentar el impacto de sustancias nocivas presentes en el cauce.

PRESENCIA POLICIAL FORTALECE DOCUMENTACIÓN 

“El objetivo es sumar pruebas mediante documentos oficiales y constataciones policiales”, explicó Salinas. La intervención fue activada tras una alerta emitida por el alcalde Richard Ale.

COLORACIÓN ANÓMALA 

La inspección se centró en el tramo este del puente Pampa Blanca, jurisdicción de Cocachacra, donde se evidenció, nuevamente, una tonalidad amarillenta atípica en las aguas. “No es el color habitual del río”, señaló.

MINERÍA EN LA PARTE ALTA, POSIBLE ORIGEN 

“Son residuos minerales con sustancias nocivas, probablemente provenientes de la parte alta de la cuenca del río Tambo”, sostuvo la funcionaria, basándose en estudios anteriores.