Por: Enrique Rivera Salas (Periodista Colegiado)
Aunque parezca mentira, pero es cierto, una balanza municipal desde hace mucho tiempo por no decir años, se encuentra en el mercado San José de Mollendo, abandonada sin prestar el importante servicio que tiene para la comunidad: es decir que se encuentra “bajo siete llaves”.
En este tiempo de pandemia tan difícil y que prácticamente hay falta de trabajo en general, se hace necesario que la comuna actual la active para beneficio de las amas de casa.
Ante la inexistencia, prácticamente, de la balanza que sirve para que las madres de familia, pesen sus productos y reclamen de ser necesario; existen inescrupulosos vendedores especialmente de carnes, pollos y pescados que se aprovechan en la temporada de verano, con la masiva concurrencia de gente que acude al mercado y calles adyacentes, para poder comprar sus productos de panllevar, especialmente de estas carnes.
Lo preocupante ocurre en las calles La Mar e Islay donde algunos malos comerciantes adulteran las balanzas entre 50 y 100 gramos. La interrogante es ¿Quién controla si las balanzas están revisadas en peso oficial? La respuesta es: Nadie.
Como el control es nulo se hace necesario que la active la administración municipal, y ponga en funcionamiento esta moderna balanza a fin de poder controlar el peso exacto de los artículos adquiridos en el centro de abastos “San José”, para tener la certeza que el peso es el correcto, para lo cual debe de destacarse a un efectivo de la Policía Municipal que esté presente a fin de realizar el pesaje correspondiente hasta un máximo de 50 kilos y recibir las quejas de aquellas personas que no estén conformes.
La Administración del Mercado Municipal debe supervisar este servicio que debe brindar la municipalidad, ya que es completamente gratuito, porque va en beneficio integral de las familias, en general.
Se aclara que la balanza es solo para el pesaje de artículos de nuestro mercado “San José”.
Lamentablemente la balanza municipal está en este aparador, cerrada con candado.
