POR: MIGUEL ARTURO SEMINARIO OJEDA
DIRECTOR DEL MUSEO ELECTORAL Y DE LA DEMOCRACIA DE LA DNEF DEL JURADO NACIONAL DE ELECCIONES)
Se tiene noticia de elecciones en Moquegua, desde fines del virreinato. Votar de manera responsable, es un gran deber para la ciudadanía, como se espera que se ponga en práctica el próximo 2 de octubre, cuando los peruanos y las peruanas elijan a sus alcaldes distritales y provinciales, y a los gobernadores regionales, como ocurrirá en toda la Región Moquegua, de acuerdo a la última convocatoria.
Este proceso se realizará, en medio de una contienda electoral, en la que las organizaciones políticas ofrecen una serie de propuestas, a consideración de todos los ciudadanos y ciudadanas, y que, utilizando modernas estrategias, asociadas a las nuevas tecnologías de la información, buscan lograr un lugar privilegiado dentro de las preferencias de los votantes.
Se asoma en todo el país, una larga lista de candidatos que, de diferentes maneras, y con apoyo de la propaganda política presentan sus propuestas ante los ojos de la ciudadanía, para que quienes voten reflexionen previamente, sobre a quién elegir como autoridad en su jurisdicción, para no arrepentirse después, y llegar a la vacancia y revocatoria. Todo esto requiere de un voto informado.
LUNA PIZARRO: PRECURSOR DEL VOTO INFORMADO
El Perú tiene una profunda tradición sobre educación cívica ciudadana desde los comienzos de la República, asociándose esta temática a don Francisco Javier de Luna Pizarro, quien, en 1833, al convocarse a elecciones, expresó su deseo de contar con un voto informado, que en sus propias palabras “debe ser justo, ilustrado y digno de la patria”, ubicándosele de esta manera, como el precursor del voto informado.
Delegar poder a las autoridades en democracia representativa, equivale al llamado para decidir por aquellos que tendrán la representación local, distrital, provincial, regional y/o nacional, como se vivirá el domingo 2 de octubre, y debe hacerse de manera responsable, como se motiva desde el Jurado Nacional de Elecciones.
Luna Pizarro instó al gobierno y a los ciudadanos a votar de manera razonada, con información previa de las competencias y calidad de los candidatos, y votar pensando en el bienestar general, y no de manera particular. Ubicamos el impreso del discurso de Luna Pizarro en la Biblioteca Nacional, descubriendo en él, a un personaje de profunda vocación democrática, y comprometido con la realidad del país.
¿QUÉ ES EL PROGRAMA ESTRATÉGICO VOTO INFORMADO?
El Jurado Nacional de Elecciones, desde la Dirección Nacional de Educación y Formación Cívica Ciudadana, a cargo de la Dra. Milagros Suito Acuña, trabaja en los temas que le son propios, asociados a la internalización y al fortalecimiento de los valores cívico ciudadanos que deben inspirar el comportamiento de los peruanos y peruanas en el momento de elegir a sus representantes, como se hace periódicamente de acuerdo a la Constitución y a las leyes electorales.
El voto informado, es un programa estratégico que, desde el Jurado Nacional de Elecciones, busca promover la capacitación en herramientas especializadas dentro del marco político-electoral, así como de incidencia para reforzar la participación política informada de los públicos objetivos establecidos.
¿CÓMO FUNCIONA EL PROGRAMA ESTRATÉGICO VOTO INFORMADO?
Las actividades que se desarrollan tienen dos miradas estratégicas: i). político (que busca llegar a consensos en favor de la ciudadanía -generar información y compromisos) y ii). educativo (diversas actividades educativas que pueden ser estas formativas, de asistencia técnica, informativas y de difusión).
La principal fortaleza del Programa Voto Informado son las acciones de capacitación y asistencia técnica. En específico, la capacitación se basa en la planificación de talleres que proporcionan conocimientos, fortalecimiento de capacidades, así como el recojo o identificación de demandas para ofrecer respuestas técnicas en contextos particulares. Mientras que, las de asistencia técnica o asesoría hace referencia al acompañamiento y soporte directo para el logro determinado de una organización política en la adopción de enfoques participativos e inclusivos, así como la solución de obstáculos en el proceso electoral, a través de asistencia técnica respecto a enfoques o estrategias pertenecientes a la DNEF.
Entre las principales acciones de este programa, se considera al Pacto Ético Electoral, compromiso que suscriben las organizaciones políticas en época electoral. Para la realización de esta actividad se desprenden acciones de coordinación y negociación con las organizaciones políticas, el cual tiene productos específicos de actividades de índole político.
LA EDUCACIÓN CÍVICA CIUDADANA: UN ESFUERZO CONSTANTE
Entre los peruanos, al parecer, en 1833, se recibió el mensaje de Luna Pizarro, como un reto, ya que pocos años después, se observa, que desde mediados del siglo XIX, queda una plena evidencia de la vocación democrática del Perú, a través de una serie de publicaciones, como el “Diccionario para el pueblo”, de Juan Espinoza de los Monteros, autor uruguayo-peruano, quien a través de su libro valora al pueblo como actor político, en medio de una sociedad tradicional, que conservaba fuertes ataduras con la manera de pensar y de obrar de los peruanos del virreinato.
En el siglo XXI, el pueblo continúa como un actor político decisivo, donde ciudadanas y ciudadanos deciden y apuestan por el futuro de la patria a través de sus gobernantes, y aunque a veces, después del ejercicio del poder, señalan haberse equivocado, ahora en expresión de la dimensión de relación del poder, se los quitan, usando mecanismos legales para cortarles el poder que les endosaron.
Otra evidencia de ese esfuerzo estatal por la educación cívica ciudadana, es la “Lira patriótica del Perú”, antología poética, que es una compilación de poesías de autores nacionales, con poemas orientados a levantar el espíritu patriótico de los peruanos. Fue publicada en 1853 por Manuel Nicolás Corpancho, y contiene poesías compuestas desde antes de la proclamación de la independencia, que mueven no solo el espíritu patriótico, sino también los sentimientos de civismo.
A este tipo de publicaciones, corresponde el “Catecismo Patriótico para uso en las escuelas municipales” hecho en forma de diálogos, como obra didáctica orientada al fomento del amor a la patria entre la juventud, por el reconocido Francisco de Paula Gonzáles Vigil. El catecismo salió a luz en el Callao en 1856, y sucesivamente se reeditó en Arequipa, (1860), Paris, (1865), Tacna (1878) y Huánuco, (1882), circulando por todo el país, en un momento en que informarse era difícil, no como ahora, que a una velocidad increíble nos enteramos de cuanto queremos saber, como ocurre en el actual proceso de elecciones regionales y municipales.
Por Decreto del 11 de noviembre de 1868, se mandó que en los colegios primarios se enseñe la Constitución Política de la República, y se obligó a los preceptores su cumplimiento, por circulares del 30 de marzo y 22 de junio de 1869; es decir, que se tuvo confianza en que los maestros desde las aulas podían fortalecer la conciencia cívica ciudadana, motivando en responsabilidad a los futuros ciudadanos, al elegir a sus autoridades, como se hará dentro de unos días en todo el país.
Y desde entonces, hasta el presente, continúan diferentes acciones para que los ciudadanos voten de una manera informada, que les permita comparar entre candidatos, para elegir la mejor opción, como sucederá en Moquegua, y en todo el país, el 2 de octubre de 2022.