La subprefecta provincial de Islay, Lizbeth Zevallos Chirinos, dio cuenta ayer que su despacho está a la espera de una respuesta formal por parte de la jefatura zonal de Sedapar Mollendo, en donde se dé a conocer el motivo por el cual no se aperturan las puertas de las oficinas en esta ciudad, teniendo en cuenta que la provincia de Islay viene recuperando sus actividades.
“Hemos enviado un documento al jefe zonal (Sedapar) indicándole que estamos en un nivel de alerta moderada y que ya casi todo está funcionando (…) No hemos recibido ninguna respuesta, ni positiva ni negativa, por lo que reiteraremos el pedido, pues el documento se presentó la semana pasada”.
La primera autoridad política dijo que en anteriores ocasiones la empresa del agua, argumentó que la sede cuenta con población vulnerable y que por ese motivo no podían abrir.
“Les hemos pedido que al menos aperturen una oficina, aunque sea en un horario especifico; no de repente todo el día, pero sí unas horas que permita a las personas que desconocen el tema de trámites virtuales, tener una asesoría u orientación de forma presencial”
En esa línea dijo que su despacho iniciará atención todos los días desde el 1 de octubre, algo que debiera inducir a que la empresa Sedapar, haga lo propio en beneficio de la población.
CERRADO DESDE EL INICIO DE LA PANDEMIA
Cabe indicar que las oficinas de la empresa Sedapar se encuentran cerradas para la atención al público de forma presencial desde marzo de 2020, cumpliéndose solo con trámites vía telefónica y virtual por internet, atendiendo en algunos casos personalmente.