El ciudadano Jheriko Palacios Chapa denunció ante la Policía Nacional una presunta agresión contra su menor hijo de ocho años, atribuida al padrastro del niño. Según su testimonio, el 17 de mayo, al recoger al menor, su abuela notó que presentaba un moretón en el pómulo. Inicialmente, el niño afirmó que su hermano lo había golpeado accidentalmente con la cabeza.
“HAY SECRETOS QUE SE TIENEN QUE GUARDAR”
Sin embargo, ante la insistencia de la abuela, el menor confesó que fue abofeteado por su padrastro, y que no lo había contado antes porque le dijeron que “hay secretos que se tienen que guardar” y que “no se puede estar contando todo”.
PADRE PREOCUPADO
Tras su llegada desde Arequipa, Palacios continuó con el proceso de denuncia, y el martes por la mañana el Poder Judicial emitió una sentencia que ordena medidas de protección a favor del menor, incluyendo terapia psicológica tanto para él como para el presunto agresor.
“Mi preocupación es que no se ha dictado una medida de alejamiento. Temo que mi hijo pueda volver a ese entorno de violencia y que existan represalias”, declaró Palacios. Asimismo, indicó que apelarán la decisión judicial para solicitar medidas más severas que garanticen la integridad física y emocional del menor.
REVERSIÓN DE LA TENENCIA
Actualmente, la tenencia del niño la tiene la madre. Ante este nuevo hecho, el padre anunció que solicitará la reversión de la custodia. Cabe resaltar que anteriormente ya se habían presentado dos denuncias: una por desprotección y otra por violencia familiar.