Por: Carlos Carpio Montoya
Mi primer recuerdo de Matarani data de 1970 cuando acompañaba a mi tía María Luisa Montoya Paz “mamá Mery” en sus labores docentes en el colegio “Miguel Grau” para aprovechar el tiempo, como decía mi madre, pues recién ingresaría al colegio en el Núcleo Educativo Comunal de Mollendo al año siguiente.
El colegio se llamaba “Escuela Primaria Mixta N° 9646” y funcionaba, desde hacía varios años, al costado del puesto policial, teniendo como foco los hijos de los empleados que vivían y trabajaban en Matarani, muchos de los cuales habían llegado de Mollendo, Quilca y otros lugares de nuestro departamento.
Mi “mamá Mery” fue nombrada como profesora de ese colegio en 1966. Era directora la señora Gabriela Franco de Navarro y las profesoras eran: Srta. Rosa Ibarra, primer año con 40 alumnos; Srta. María Luisa Montoya “mamá Mery”, segundo año con 32 alumnos; Srta. Sila Valencia, tercer año con 30 alumnos; Srta. Lily Alfaro, cuarto año con 25 alumnos; Srta. Ruth Martínez, quinto y sexto año con 15 y 10 alumnos, respectivamente.
Desde esas épocas el apoyo de Enapu Perú, ahora Tisur, fue y es vital para el desarrollo del colegio, de los jóvenes y de la población de Matarani; como detalle de aquellos años, los buses amarillos de Enapu que trasladaban a los trabajadores desde Mollendo a Matarani, también transportaban a las profesoras; las recogían a las 7 am, regresaban al mediodía para el almuerzo y, luego a las 5 pm las llevaban a sus casas. Obviamente yo era el engreído del bus amarillo y me daban siempre un lugar preferente para disfrutar de las vistas que ofrecía el trayecto.
Hoy el apoyo continúa, y hace unos días pude ver a nuestro paisano Mauricio Núñez del Prado, gerente general de Tisur, en el encendido del árbol navideño en Matarani compartiendo con los niños, tal como lo pude compartir yo con los amigos de Enapu y mis amigos del colegio “Miguel Grau” en la navidad de 1970 en Matarani.