Grandes pérdidas económicas se están registrando en el comercio exterior en todo lo que significa el tránsito internacional entre Perú y Bolivia.
El operador portuario Nery Fernández, mostró su preocupación por que desde TISUR en Islay y el puerto de Ilo no se pueden enviar las cargas a los consignatarios, importadores y exportadores de Bolivia, porque no pueden sacar sus mercancías a través de puertos peruanos.
“Todo esto está generando enormes pérdidas a todos los operadores de comercio exterior y las consecuencias son mayores, porque todo este comercio se está trasladando a la zona norte de Chile. Será muy difícil recuperar los clientes y toda la ruta comercial que se tiene en el Perú, originando un conflicto”, refirió.
Desde el 4 de enero del 2023 que se inició los paros en el Perú aproximadamente 500 camiones bolivianos están varados muy cerca de la frontera de Desaguadero que es el punto de cruce entre ambos países.
Muchos de estos camiones son cisternas que llevan combustible, aceite de girasol, soya líquida y productos de acero como bovinas y planchas materiales que sirven para la construcción.
Según la Cámara de Comercio de Bolivia, son cerca de 500 millones de dólares que se está perdiendo, lo cual es alarmante.
Se espera que haya una solución cuanto antes, porque el conflicto interno está afectando definitivamente de manera muy fuerte el comercio bilateral.