POR: ANITA PEÑALOZA
Agradecer a Dios después de haber respondido nuestra oración se llama: GRATITUD. Darle gracias a Dios antes se llama: FE.
Mi papito René Peñaloza Chávez, estuvo 28 días hospitalizado, dentro de esos aproximadamente 19 días en UCI y 9 días en observación.
La fuerza de la Fe, la ciencia y los médicos de UCI con su esfuerzo salió de esta mi papito.
Después de la tormenta viene la calma y agradezco a cada uno de ustedes por sus oraciones, alientos, preocupaciones y mensajes cada día era crucial por la evolución de mi papito, pero no encontrábamos tranquilidad.
Pero ahora sonrío y soy feliz, no porque mi vida sea perfecta, sino porque Dios realizó el milagro más maravilloso, valoro a quien tengo a mi lado y agradezco al Señor todos los días por ello.
Fueron días grises de solo saber cortas respuestas, pero cuando me dijeron “su papá está fuera de peligro” a mí y mi familia regresó la tranquilidad y una fuerza de volverte a ver. El momento más bonito fue ver tu rostro, sentir tus manos y reconociste a cada uno de nosotros que luchaste contra viento y marea para reencontrarnos porque nuestro Dios tiene un propósito para ti y yo estaré ahí papito apoyándote en lo que tú digas.
Salir de UCI, capaz muchos conocen que es esa unidad decir la última fase, palabras desalentadoras que era muy difícil ver la luz de esperanza y recuperarse. Pero el luchó y ahora ya está en casa.
Agradezco de todo corazón a cada uno de mis amigos que me apoyaron desde el primer momento. Y así mismo al director de EsSalud Moquegua al administrador siempre atento, a los doctores de UCI Dr. Silva, Dra. Gamero, Dr. Alejandro, Dr. Fernández y si me olvido de uno disculpen pero me grabe sus nombres por todos los días de estar y preguntar por papá a las enfermeras me acuerdo cada una de ellas muy largo en mencionar, a las técnicas (os) por todo el apoyo y el cuidado.
Como también a los de seguridad que ya me conocían y sabían que era preguntar por papá y tratar de estar cerca. No nos importaba las horas, el frío y esperar hasta ver una respuesta o evolución favorable.
Hoy ya lo tenemos en casa, es una paz que no se pueden imaginar pero mi fe no me abandonó ni las oraciones de ustedes mil gracias por su preocupación y estar pendiente de mi papito.
El amor de Dios es el amor sobre todos los amores, llena los vacíos, calma dolores y se lleva todos los temores. Te amo papá.
