POR: ROGELIO PERALTA A.
Es cierto también, que una parte del capital recibido se redistribuyó como “gasto” para desarrollar políticas sociales diversas (infraestructura y programas de educación y salud, desarrollo de capacidades, inversión en servicios básicos, programas de apoyo social a sectores en extrema pobreza y otros), inversiones en infraestructura vial (carreteras, puente y otras), políticas de desarrollo en obras trascendentales o significativas, que generen fuentes de trabajo para nuestra sociedad.
Finalmente, cabe mencionar, los ingentes recursos económicos o capital retirado del canon, regalías y de las manos de los ciudadanos para el cumplimiento de las obligaciones financieras del Municipio, como son los pagos por el servicio de obras sociales, etc. Ud. amigo lector, tuvo la oportunidad de trabajar en alguna obra y que de alguna manera se le ha redistribuido parte del canon y/o RDR de lo que Ud. paga a través de sus impuestos? ¿o simplemente sirvieron para acomodar a familias, compadres, cuñados y personas del movimiento político de turno?, o no le dieron la oportunidad de trabajar en alguna conclusión de obra? Tanto la Municipalidad representado por los ineptos alcaldes no le dieron la oportunidad a pesar de tanto canon generado por Moquegua.
Tanto el canon, regalías mineras (abundantes) y RDR (escasos), que, si bien el primero es cuantioso, pudieron ser mejor aprovechadas y mejor distribuidas a favor del pueblo o afrontadas con una gestión municipal transparente, honesta y eficiente, pero este canon recibido por la municipalidad debió permanentemente ser redistribuido, cuyo capital perdido de los moqueguanos terminó naturalmente concentrado en los bolsillos de los corruptos y sus “argollas”.
Solo la inversión eficiente y transparente de esos recursos para los siguientes años es lo que garantiza que ese “canon potencial” que se retiró de manos de los moqueguanos no se perdiera sino que se convirtiera en una “permuta de bienestar” para nuestro pueblo castigado por la inopia de los ineptos alcaldes, es decir, lo que da a todo tributo el carácter de “inversión inespecífica” (finalmente los moqueguanos no deciden en que se invertirá sus impuestos) en lugar de ser una arbitraria exacción. Sin embargo, nuestra provincia no ha conocido desde hace décadas otra situación económica que no sea la del déficit fiscal; es decir, a la Municipalidad Provincial de Mariscal Nieto siempre le ha faltado más y repetidas veces muchísimo más para mantenerse como municipio y cumplir con las obligaciones de Ley a favor de la sociedad.
Por eso, es mejor saber cuántas pagas, aunque sea mucho, en lugar de desconocer cuanto te roban. En Moquegua ningún municipio se salva, todos los ex alcaldes han sido también susceptibles a la corrupción política. Las formas de corrupción varían, pues al margen de la apropiación ilegítima de los recursos económicos, las más comunes son el uso ilegítimo de información privilegiada, el tráfico de influencias, la argolla, el patrocinio, sobornos, extorsiones, influencias, fraudes, malversación, el robo, la prevaricación, el abuso de autoridad, el compadrazgo, el nepotismo y la impunidad.
Así, la Municipalidad Provincial de Mariscal Nieto es asumido como un medio para enriquecerse, descuidando, cada vez más, las más elementales obligaciones y objetivos del buen gobierno. Estas conductas se reproducen y alcanzan a todos los sectores de la elite en el poder (empresariales, financieras y de toda índole). Un ejemplo de ello es que los alcaldes siempre pretenden repetir el plato yendo a la reelección, pues no quieren dejar la “mamadera” o la “mina de oro” y el poder; salir de la pobreza es su objetivo, a más dinero del canon más robo sistemático. ¿Hoy en día, por ejemplo, los alcaldes se endeudan, empeñan el municipio, lo que nunca sucedió con otros alcaldes.
El caso de Quispe Mamani, es patético, siempre se ha quejado del presupuesto disminuido; quieren más presupuesto, y le duele que el canon haya bajado o disminuido, ¿para qué? Si este sujeto no ha demostrado absolutamente nada en obras de envergadura. La gestión municipal del “mente cuadrada” y sus “talentos, ha recibido nada menos que la exorbitante suma de más de 330 millones de soles, ¿dónde quedaron las promesas de la Caja Municipal y de las cinco mil viviendas? ¿Dónde quedaron sus falsas promesas sobre preservación del medio ambiente, el relleno sanitario, los residuos sólidos, un mercado moderno, el camal más moderno?
(*) Del libro en preparación: ¿Mafia y Corrupción en la Municipalidad Provincial Mariscal Nieto?
