15.8 C
Ilo
17.2 C
Moquegua
15.8 C
Omate
13.1 C
Arequipa
14.4 C
Mollendo
17 septiembre, 2024 4:03 am

La izquierda socialista boliviana de Arce – Morales endeuda a su país y sacrifica el futuro de su pueblo

Una gran proporción del presupuesto nacional puede ser destinada al servicio de la deuda en lugar de ser invertida en programas que mejoren la calidad de vida de los ciudadanos.

POR: ECON. RICHAR MAQUERA QUISPE     

Bolivia ha experimentado un incremento constante en su deuda externa en términos absolutos, en relación con el Producto Interno Bruto (PIB) y en términos per cápita en la última década. En 2022, la deuda total alcanzó 33.642 millones de euros, lo que representa un 80,01% del PIB y una deuda per cápita de 2.785 euros. Esto marca un aumento considerable respecto a años anteriores, cuando la deuda era significativamente menor en términos absolutos y relativos.

La deuda per cápita ha crecido desde 560 euros en 2010 hasta 2.785 euros en 2022. Este aumento refleja un mayor endeudamiento individual que puede llevar a un incremento en la carga fiscal para los ciudadanos. Esto es preocupante porque, mientras la deuda crece, los recursos disponibles para programas sociales y servicios públicos se ven reducidos, afectando desproporcionadamente a la población más vulnerable.

La deuda en relación con el PIB ha escalado de un 37,64% en 2010 a un 80,01% en 2022. Esta proporción creciente indica que el país está asumiendo una cantidad de deuda cada vez mayor en relación con su capacidad económica. El creciente nivel de deuda también afecta el futuro económico del país.

La deuda elevada puede limitar la capacidad del gobierno para realizar inversiones en infraestructura, educación y salud, que son cruciales para el desarrollo y la reducción de la pobreza.

Análisis & Opinión