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11 octubre, 2024 12:20 pm

La crisis de Petroperú demuestra que el Estado es pésimo administrador

Las pérdidas de una empresa tan grande y de impacto nacional pueden tener repercusiones en la economía peruana.

POR: DR. PHD. JAVIER FLORES AROCUTIPA      

Entre 2018 y 2019, Petroperú mostró utilidades netas, con ganancias de 119.552 millones de dólares en 2018 y 170.635 millones de dólares en 2019. En 2020, la empresa registró una pérdida neta de -67.280 millones de dólares.

En 2021, Petroperú logró recuperar parte de las pérdidas del año anterior con una utilidad de 67.937 millones de dólares. Sin embargo, en 2022, a pesar de la recuperación en 2021, Petroperú mostró una pérdida considerable de 271.2 millones de dólares. Las pérdidas continuaron en 2023, alcanzando 822.7 millones de dólares, lo que representa una situación crítica para la empresa.

La magnitud de las pérdidas en 2022 y 2023 podría estar vinculada a una mala gestión financiera, altos niveles de deuda o inversiones fallidas en proyectos que no generaron beneficios a corto plazo. Esto sugiere la necesidad de una revisión profunda de las políticas financieras y operativas.

Dado que Petroperú es una empresa estatal, las grandes pérdidas de los últimos años pueden poner presión sobre el gobierno peruano para tomar decisiones sobre cómo intervenir en la empresa. Podría ser necesario revisar los subsidios, las políticas de precios y los mecanismos de financiamiento de la empresa para garantizar su viabilidad futura.

Las pérdidas de una empresa tan grande y de impacto nacional pueden tener repercusiones en la economía peruana. Las dificultades de Petroperú podrían generar un efecto dominó que afecte otros sectores relacionados con la energía y el transporte, y provocar implicaciones en el empleo y la estabilidad fiscal del país.

INEFICIENCIA EXTREMA PÉRDIDAS SUMAN -US$ 832.4 MILLONES (2023-2024)

Ingresos de Actividades Ordinarias: En 2023, los ingresos fueron de 1.860,6 millones de dólares, mientras que en 2024 los ingresos disminuyeron ligeramente a 1.813,5 millones de dólares. Esta caída, aunque pequeña, sugiere una posible reducción en la demanda o en los precios del petróleo, lo que afectó las ventas de Petroperú.

Gastos de Ventas, Distribución y Administración: Los gastos de ventas y distribución, así como los de administración, se mantuvieron relativamente estables en ambos períodos (alrededor de 32 millones de dólares y 70 millones de dólares, respectivamente). Esto sugiere que la empresa no ha implementado ajustes significativos en estos rubros para reducir costos.

Gastos Financieros: Los gastos financieros aumentaron significativamente, de 117 millones de dólares en 2023 a 200.3 millones en 2024 (enero-junio). Este incremento probablemente se debe al aumento de las tasas de interés o a la acumulación de deuda, lo que agrava la situación financiera de Petroperú y eleva los costos de financiamiento.

Pérdida Neta: La pérdida neta en el período de enero a junio de 2023 fue de -380.3 millones de dólares, y en 2024, esta pérdida aumentó a -452.1 millones de dólares. Esta acumulación de pérdidas es preocupante, ya que indica una tendencia negativa que podría poner en riesgo la sostenibilidad a largo plazo de la empresa si no se toman medidas correctivas importantes.

Reflexión General: La empresa sigue enfrentando pérdidas considerables, lo que refleja un problema estructural en la gestión de sus operaciones y su financiamiento. Si Petroperú no toma medidas drásticas para corregir su trayectoria financiera, es probable que las pérdidas continúen acumulándose, lo que podría tener consecuencias negativas tanto para la empresa como para la economía peruana en general, dado su impacto en el sector energético del país.

Análisis & Opinión