Tras cumplirse con la subasta pública de los espacios en la playa Pozo de Lisas, solo tres restaurantes lograron ser adjudicados, mientras que cinco espacios quedaron desiertos. La situación se repitió en algunos de los quioscos y en la playa Puerto Inglés, mientras que, en Boca del Río, todos los espacios fueron adjudicados.

El regidor Juan Puma expresó su preocupación y destacó que los vendedores interesados han solicitado que se convoque una segunda subasta, ya que el retraso en el proceso podría afectar el inicio de los servicios en la temporada de verano.

“El proceso normalmente demora un mes. Si la primera subasta terminó el 15 de diciembre y si se inicia la segunda el 20 de diciembre, podría concluir el 20 de enero. Esto afectaría el arranque de la temporada”, señaló el regidor.

Puma hizo un llamado a la Gerencia de Desarrollo Económico y Social de la MPI para que presente lo antes posible la propuesta de las bases para la segunda subasta, con el objetivo de asegurar que los espacios estén listos para la temporada alta de turismo.