POR: JORGE ACOSTA ZEVALLOS (ECONOMISTA DEL CEOP ILO)
El presidente de los Estados Unidos (EE. UU.) Donald Trump ha reiterado que impondrá mayores aranceles a la importación de cobre a su país bajo el argumento de que, para evitar el “dumping” que están haciendo a través de los altos impuestos a las ventas, los países productores de metal cobrizo le están haciendo una competencia desleal.
Para comprender lo importante del anuncio para nuestro país, exportador nato del cobre en todas sus versiones, definamos qué es el arancel. En pocas palabras, es un impuesto a las importaciones. Lo sorprendente es que el principal fomentador del libre comercio internacional, sin impuestos ni barreras a las exportaciones e importaciones, ha sido los EE. UU. Recordemos que este país fue el promotor de los Tratados de Libre Comercio (TLC) y el más famoso fue el que firmaron con México y Canadá, con la idea de colocar sin barreras sus exportaciones. Lo que pasa es que hoy estos tratados ya no les favorecen, porque su balanza comercial es negativa: los productos importados son más baratos que los que ellos producen.
En el caso del cobre, petróleo, aluminio y otros, es más barato traerlos de otros países y, por tanto, salen más divisas de su país que las que ingresan. En el 2024 tuvo un déficit en la balanza comercial de 918,4 millones de dólares, muy superior al del 2023. Se agrega que el país de los rascacielos, en el 2024, tuvo un déficit fiscal de 1,833 billones de dólares, que representó el 6.4% de su Producto Bruto Interno (PBI).
Entonces, estamos ante el país —primera potencia mundial, que todavía lo es— con grandes problemas económicos, que pretende revertir el libre comercio con nuevas reglas a su favor. Y, volviendo al cobre, la idea “trumpista” es que los países productores le paguen más “peaje” para ingresar mercaderías a su país. En segundo lugar, fomentar la explotación del cobre en su propio territorio, que también lo tiene, pero que resulta insuficiente y de alto costo.
Algunos voceros de la minería peruana, como Juan Carlos Ortiz, del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), han expresado que no tendrán efecto en el Perú, porque solo exportamos a Norteamérica el 10% y el mayor porcentaje lo realizamos hacia China.
Desde nuestro punto de vista, esta opinión es muy parcial: se mira un solo árbol y no se mira el bosque. La propuesta de Trump es más compleja, porque si sube el arancel norteamericano, los países que exportaban a ese país van a competir con el nuestro por el mercado chino. Y, no descartamos que, en el escenario mundial, después de la aplicación de la elevación del arancel en el país de George Washington, los países de mayor desarrollo repliquen lo mismo. Aparte, el programa de Trump es condicional: “¿Quieres vender tu cobre en mi país? ¿Qué me das? ¡Cómprame a mí y no a los chinos, o saca a los chinos de Chancay!”. Solo para expresar un ejemplo que ya lo está aplicando con Panamá.
Entonces, el tema no es tan simple; si suben los aranceles por todas partes, ocurrirá el “efecto lavadora” que se aplicó en el primer gobierno de Trump: a la importación de lavadoras de México le elevó los aranceles, y los precios de estas se elevaron a las nubes y pocos las demandaban, y los que aventuraban a producirlas internamente no lograron contar con costos competitivos por el elevado costo laboral.
Ingresamos al mundo de la incertidumbre, donde se mezclan los intereses de la gran potencia, los afectados y la sustitución del libre mercado por políticas proteccionistas que en América Latina no dieron buen resultado. Y tenemos que los principales productores de cobre, Chile y Perú, suman más del 40% de la producción mundial.
En síntesis, en el caso del cobre, los afectados de la suba del cobre son los ciudadanos de la clase media y los pobres de Estados Unidos, porque sus productos van a estar encarecidos. Segundo, los países productores de cobre, porque disminuirá la demanda de cobre y, por tanto, los ingresos de las empresas se reducirán, y el “canon” —de cada día que no lo gastamos bien— se verá también afectado en un mundo de incertidumbre. Chile, Perú y el Congo son los que tienen las empresas más poderosas de la economía extractora de cobre, según la información de Mines Visual.
¿QUÉ ES UN ARANCEL?
Un arancel es, en pocas palabras, un impuesto a las importaciones. Resulta paradójico que EE. UU., principal defensor del libre comercio, ahora adopte medidas proteccionistas. Históricamente, fue promotor de los Tratados de Libre Comercio (TLC), como el firmado con México y Canadá, con el fin de eliminar barreras comerciales.