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Descontento acrecentado

POR: JORGE ACOSTA ZEVALLOS – ECONOMISTA CEOP ILO

En la ciudadanía y líderes de Ilo dos noticias suscitan descontento e interrogantes. La primera es la pretensión de cercenar lo que consideran es su territorio provincial en la propuesta de creación del distrito de San Antonio, la segunda es la distribución del canon entre los distritos de Moquegua y en las que los distritos de Ilo reciben menos comparativamente con los de la provincia de Mariscal Nieto. Sobre el tema limítrofe territorial entre las provincias de Ilo y Mariscal Nieto deberá esta resolverse en marco eminentemente técnico; los mapas existen, las referencias son las coordenadas geográficas y la tecnología es satelital, por tanto, no nada que negociar.

Sobre el segundo tema, es justificable y entendible la molestia ileña, ver llegar el cobre bruto a la fundición y refinería de cobre y exportarlo con valor agregado metalúrgico, recibir afectaciones ambientales y ser desfavorecido en la distribución del canon no es para menos. Mal o bien la distribución es resultado de la Ley canon, de los índices anquilosados del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) así lo determinan.

Hay que recordar que las primeras propuesta impositiva en los años 80 era sobre el recurso natural extraído y los gobernantes, la empresas y sus partidos pusieron el grito en cielo con el argumento que se alentaría al fuga de la inversión extranjero, propusieron el canon que era una deducción 50% del Impuesto a la Renta (IR) que ya pagaban las empresas mineras, la ley de canon privilegio que los mayores de distribución se entregaran a los distritos y provincias donde estaba el mineral, aun mas se añadieron indicadores a favor los distritos con mayor pobreza.

Al comienzo de los años 1989 los importes de canon no eran muy significativos, pero servían para algunas obras y no hubo más aspavientos. El interés por el canon aparece a partir de los años 2004 y 2005 los precios del cobre se comenzaron a disparar hacia arriba y el canon también creció geométricamente, En el 2008 sucede que Moquegua que producía más cobre recibía menos canon que Tacna, se descubre que la ley tenía defectos como la definición de cobre beneficiado como sinónimo de movimiento de tierras en búsqueda del cobre.

El descontento se manifiesta en el Moqueguazo que paraliza el sur oeste del país, arrincona al gobierno de Alan y este decreta que el cálculo se realice sobre el cobre concentrado. Pero en este mismo periodo se hablaba de la distribución interna tenía que ser modificada añadiendo a los distritos productivos. El Dr. Héctor Villegas Corrales indicaba que en el texto original de la Ley de Canon señalaba que el área de influencia para la distribución se realiza áreas de influencia y las unidades económicas administrativas, que se estuvo aplicando, Ilo recibía más canon que Moquegua, pero cuando se modifica la ley se suprime las unidades económicas y los porcentajes, desde ese momento Ilo y Sánchez Cerro son marginados. Entonces tenemos como resultado una desproporcionada asignación del canon minero (véase cuadro).

Según Ernesto Herrera citando a Informes del Banco Mundial señala el departamento de Moquegua desde el 2009 al 2012 recibió transferencias por más de 3 mil millones de soles, agrega que el distrito de Pacocha, donde se funde y refina el cobre, entre el 2012 al 2017 recibió una transferencia de 3 millones de soles y el distrito de Torata, en donde se extrae el cobre, en el mismo periodo 251 millones de soles. La desproporción es extrema e injusta, pero como dicen algunos la ley es la ley y muchas de ellas son injustas.

Por lo pronto hay dos caminos, un muy difícil y otro probable. El difícil es cambiar la ley, primero que se tendría que concertar con otros distritos para lograr que la iniciativa les interese, lograr que varios congresistas se comprometan con el tema. Difícil decimos, casi imposible, porque ya en otras ocasiones ha habido intentos de realizarlo y se quedaron en el partido, en el Congreso desde hace varios años existen decenas de proyectos que duermen el sueño de los justos y si algunos de ellos avanzo algo, fueron congelados porque los distritos afectados se movilizaron, agitaron el ambiente y los congresistas, gobernantes enmudecieron y escondieron la cabeza para que nadie los vea.

La segunda, solo probable, es que, a nivel del gobierno regional, el canon recibido solo se distribuya a los distritos con bajo ingreso de canon y estos deberían alcanzar proyectos viables y factibles. Escribimos, por otro lado, la palabra probable porque la propuesta no es nueva y los que lo estuvieron antes y hoy en el gobierno regional siguieron, sobre los que tenían Torata y Mariscal Nieto, asignando presupuesto. ¿Y entonces estamos ante los hechos consumados? Primero debemos estar convencidos en lo que proponemos, segundo insistir en la asignación. Complementariamente nos adherimos al sustento del Dr. Villegas que podría volverse a tener una interpretación auténtica y original de la ley.

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