Comerciantes dedicados a la venta de carnes rojas en Ilo manifestaron su preocupación debido a que, al no contar con un camal operativo, se ven obligados a sacrificar a sus animales en otras ciudades, lo que encarece sus costos y afecta directamente su economía.
El dirigente Oswaldo Flores cuestionó la demora en la entrega de la obra por parte de la Municipalidad Provincial de Ilo (MPI), recordando que les prometieron que el camal sería entregado a fines de marzo. Sin embargo, hasta la fecha, permanece cerrado y sin fecha clara de apertura.
“Este tema es muy delicado, porque toda ciudad debe contar con un camal. Ilo no lo tiene y el más perjudicado es el pueblo, ya que los costos se incrementan para garantizar el abastecimiento de carne”, señaló Flores.
Asimismo, criticó que la gestión del alcalde Humberto Tapia solo haya priorizado el aspecto estético de la infraestructura. “El camal está bien pintado por fuera, pero no sabemos en qué condiciones se encuentra por dentro. Esperamos que se terminen los trabajos cuanto antes”, concluyó.