El último martes, la joven ileña Andrea Melithza Yturry Alave, que radicaba en España, fue asesinada a cuchilladas en su vivienda en Palmeira, Ribeira (La Coruña, Galicia).

El presunto autor del crimen fue identificado como Jhul Príncipe Casahuaman, también de nacionalidad peruana y expareja de la víctima con quien tuvo un hijo. El menor de dos años no se encontraba presente en casa, pues al momento de lo ocurrido estaba con unos familiares.

Los acontecimientos ocurrieron alrededor de las cinco y media de la tarde en la planta baja de un edificio de viviendas del número 9 de la calle Doctor Torres. Andrea Yturry y Jhul Príncipe, ambos de 25 años, iniciaron una disputa que desembocó en una confrontación física. Trágicamente, durante el altercado, la mujer fue apuñalada con uno de los cuchillos disponibles en la cocina, lugar donde se llevó a cabo el incidente.

Las lesiones sufridas por la mujer resultaron mortales. Inmediatamente después, el hombre telefoneó a un familiar para confesarle que había terminado con la vida de su expareja y que planeaba quitarse la vida también. Fue ese mismo familiar quien contactó al servicio de emergencias 112 en busca de ayuda.

Cuando la Policía llegó a la residencia, se vio obligada a forzar la entrada principal, que estaba cerrada y no había respuesta. Una vez dentro, encontraron a la mujer en el suelo de la cocina, mientras que el hombre estaba gravemente herido, con múltiples cortes en su cuerpo. Se determinó que el arma utilizada en el suceso fue hallada en el lugar. El hombre fue trasladado al Hospital de Barbanza bajo custodia policial.

Lamentablemente, la mujer ya había fallecido cuando las autoridades llegaron. Su cuerpo fue encontrado con, al menos, tres heridas de arma blanca (una en el cuello y otras dos entre el tórax y el abdomen), posteriormente, fue llevado al Instituto de Medicina Legal de Santiago para realizar la autopsia correspondiente.

REACCIONES DE VECINOS

El incidente ocurrido generó una gran conmoción en la tranquila localidad de Palmeira, dejando a los residentes incrédulos ante lo sucedido. “Parece mentira que pasen estas cosas en un sitio como este”, comentaban unas vecinas.

La mayoría de las personas que se acercaron a los alrededores del lugar del crimen admitieron no tener una relación cercana con la víctima ni con su expareja, aunque los reconocían de vista. De hecho, muchos expresaron sorpresa al enterarse de que ya no estaban juntos, ya que los habían visto con frecuencia junto a su hijo, lo que sugiere que la separación podría ser reciente.

Un vecino relataba que en alguna ocasión los había visto discutir en la calle. “Una cosa es tener una discusión y otra es llegar a las manos o que pase algo así, esto no tiene explicación”, detalló.

COMPAÑEROS LAMENTAN FALLECIMIENTO

Andrea Yturry trabajaba en la empresa Jealsa, donde su espíritu amigable y sonriente era ampliamente reconocido por sus compañeros. Ante el trágico suceso, el comité de empresa expresó el profundo pesar de toda la plantilla y solicitó a la dirección de la compañía que se guardaran unos minutos de silencio al inicio de cada turno en su memoria.

Además, manifestaron su total apoyo a la familia de la fallecida y condenaron enérgicamente este crimen.

EXPAREJA TENÍA ANTECEDENTE DE VIOLENCIA

Jhul Príncipe Casahuaman había sido denunciado en 2019 por violencia doméstica en una relación anterior. Como consecuencia de estos hechos, se le asignaron trabajos comunitarios en el Grupo Municipal de Emergencias de Ribeira, los cuales cumplió durante un mes. Esta información fue confirmada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.

[Con información de Cadena SER, Diario de Arousa, La Voz de Galicia, El Correo Gallego]