Alcaldes de Torata, El Algarrobal, Chojata, Carumas y Ubinas, al momento los peores de la región

POR: MIGUEL CÉSPEDES RODRÍGUEZ    

El avance en la ejecución de proyectos de los gobiernos locales de la región Moquegua en relación con su Presupuesto Institucional Modificado (PIM) y los montos devengados son menores en 9 gobiernos subnacionales. Así:

Municipalidad Distrital de Lloque y Municipalidad Distrital de Yunga encabezan la lista con un avance de más del 65%, lo cual indica un nivel de ejecución muy positivo en sus proyectos, reflejado en la calificación de «Muy Bien».

Municipalidad Distrital de Pacocha también muestra un avance sólido superando el 50%, una señal de que sus proyectos están progresando adecuadamente.

Las municipalidades de Coalaque, General Sánchez Cerro, Samegua, Ichuña, entre otras, presentan avances que van del 25% al poco más del 40%, lo cual se considera «Bien» o «Regular», indicando un avance moderado en la ejecución de su presupuesto.

Por otro lado, las municipalidades como San Cristóbal, Puquina, Quinistaquillas, Mariscal Nieto, están con avances inferiores al 20% y van “Mal” en la inversión municipal y peor aún los alcaldes de la Municipalidad Distrital de Torata, El Algarrobal, Chojata, Carumas y Ubinas que muestran los menores porcentajes de avance, como “Muy Mal», con menos del 15% sugieren que pueden estar experimentando dificultades significativas en la implementación de sus proyectos presupuestados o pueden estar enfrentando retos administrativos, técnicos o de otra índole que impiden un mayor desembolso de los fondos.

La variabilidad en la ejecución del PIM entre los gobiernos locales de Moquegua indica una heterogeneidad en la gestión y en la capacidad de ejecución de los proyectos. Las entidades con menor rendimiento pueden necesitar apoyo adicional o revisión de sus procesos de gestión de proyectos para asegurar que los fondos asignados sean utilizados eficientemente y en el tiempo previsto.

Esta eficiencia es crucial para el desarrollo de la infraestructura local y para satisfacer las necesidades de la comunidad de forma oportuna. Bien para los pobladores de comunas donde sus autoridades invierten, pero es una pena donde las autoridades no gestionan sus proyectos de inversión y sus pobladores no tienen chamba.

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