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23 noviembre, 2024 3:55 am

La cuarta revolución industrial

POR: CÉSAR PILCO FLORES

cesartirsop@gmail.com

El elemento fundamental que dio origen a la revolución industrial, fue la gran patente de James Watt que propulsó un cambio profundo, la máquina de vapor, que se aplicó a la locomotora y de ahí se dio el avance tecnológico.

El proceso de la Revolución Industrial en el mundo, se dio en 4 grandes saltos, que impulsaron a las economías en concordancia a los siguientes períodos de la revolución industrial.

PRIMERA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL: MECANIZACIÓN DE LA PRODUCCIÓN

Se desarrolló entre 1760 y 1830, con la energía basada en vapor; Abarcó Europa y EEUU, en un período en el que las sociedades agrarias y rurales comenzaron a transformarse en industrias del hierro, los textiles, junto con el desarrollo de la máquina de vapor, que desempeño un rol central protagónico, y que marco el paso de la producción manual a la mecanizada.

La llegada de la máquina a vapor, en 1760, fomentó la mecanización de la agricultura y la producción textil; la fábrica se convirtió en el nuevo centro de la vida comunitaria.  El avance de la industrialización creó una clase media de trabajadores. Las ciudades e industrias crecieron más rápidamente y las economías se desarrollaron, esto abrió el camino hacia la urbanización y el desarrollo de las embarcaciones y ferrocarriles.

SEGUNDA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL: LA PRODUCCIÓN MASIVA Y DE LAS CIENCIAS

Se desarrolló entre 1870 y 1914, antes de la Primera Guerra Mundial, esta revolución industrial, basada en la electricidad, fue la que colocó las bases y cimientos del mundo moderno.

Aparecen inventos como el: Motor de gasolina, aviones, fertilizantes químicos. Las innovaciones como la energía eléctrica, la radio, los teléfonos, fonógrafo y el motor de combustión interna transformaron la forma de vida de las personas.

El pensamiento y método científico avanzaba, con grandes descubrimientos en la física

Fue el período de crecimiento para las industrias preexistentes y la expansión de otras como el acero, el petróleo, y el uso de energía eléctrica para crear la producción en masa.

TERCERA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL: LA REVOLUCIÓN DIGITAL

Se dio a mediados del siglo XX (1950), e impulso en los 80, con la llegada de la electrónica, la tecnología de la información y las telecomunicaciones, se fomenta la computación y las tecnologías digitales. Se inicia con el desarrollo de la microelectrónica, de los mainframes y también de los primeros debates sobre la Inteligencia Artificial, comenzó a impulsar también el fenómeno de la Transformación digital, que mejora los procesos operativos, creando nuevos modelos de management y la integración de la experiencia del cliente por medio de la tecnología.

La revolución digital, es el avance de la tecnología desde dispositivos electrónicos y mecánicos analógicos, hasta la tecnología digital disponible en la actualidad, el ordenador personal, Internet, y la tecnología de información y comunicaciones (TIC).

CUARTA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL O INDUSTRIA 4.0: LA ROBOTIZACIÓN

Comenzó a principios de este siglo y tuvo como base la revolución digital; está caracterizada por un Internet mucho más móvil y mundial, por sensores más pequeños y más potentes. Se caracteriza por una fusión de tecnologías actualmente en prueba o en desarrollo, lo que está desintegrando las fronteras entre las esferas física, digital, y biológica. Con la automatización y el intercambio de datos, en el marco de las tecnologías de manufactura y desarrollo.

Es la fase de la Robotización, la transición hacia nuevos sistemas construidos sobre la base de la infraestructura de la revolución digital; no se define por un conjunto de tecnologías emergentes en sí mismas, sino por la transición hacia nuevos sistemas que están construidos sobre la infraestructura de la revolución digital; trae consigo una tendencia a la automatización total de la manufactura, hacia una total independencia de la mano de obra humana.

Los ejes sobre los cuáles trabajarán son: Las tecnologías convergentes e industrias 4.0, energía sostenible, biotecnología, medio ambiente, bio-economía, ciencias sociales, desarrollo humano, equidad, océanos, recursos hidrobiológicos, ciencias de la vida y la salud, industrias creativas, culturales y ciencias básicas y del espacio.

Estas nuevas tecnologías energéticas pueden crear fuentes de bajo costo y sustentables (para liberarnos de los combustibles fósiles, originados en la primera revolución industrial); elevar los niveles de ingreso, mejorar la calidad de vida de poblaciones enteras, que se han beneficiado con la llegada del mundo digital (hacer pagos, escuchar música o pedir un taxi desde un celular).

ÍNDICE GLOBAL DE INNOVACIÓN (ÍGI)

El ÍGI de 2019, (12.ª edición, aplicado a 129 países), es el principal instrumento de análisis comparativo, para conocer la situación de la innovación en todo el mundo.

ÍGI, es una clasificación de las economías del globo, en lo que respecta a sus capacidades y resultados en el ámbito de la innovación. Se tiene en cuenta la función de la innovación como motor del crecimiento económico y la prosperidad, así como la necesidad de que exista una amplia visión de la innovación, aplicable a las economías desarrolladas y emergentes.

El Índice Global o Mundial de Innovación de 2019 se calcula a partir 7 pilares: 1) instituciones, 2) capital humano e investigación, 3) infraestructura, 4) desarrollo del mercado y 5) desarrollo empresarial, 6) producción de conocimientos y tecnología y 7) producción creativa.

En América Latina entre las economías latinoamericanas mejor posicionadas son Chile, en el lugar 58 y Uruguay en el puesto 62, que invierten en CTI entre 0.3 y 0.4/PBI anual respectivamente.

REFLEXIONES FINALES

El proceso de transformación industrial, sólo beneficiará a quienes sean capaces de innovar y adaptarse. La Cuarta Revolución Industrial es el camino del tiempo, por lo que temenos que cruzar y estar en él; las economías regionales deben estar consignando presupuestos con destino a las Inversiones en Ciencia Tecnología e Innovación, en convenio con Universidades, Centros de investigación de referencia mundial, que, por nuestra especial, posición geoestratégica, debemos estar presentes.

El promedio de los países que invierte en CTI en América Latina es del 0.6%, que sería la base, para que los actuales Gobernadores Regionales deben destinar inversiones hacia estas iniciativas de reto tecnológico, si queremos estar presentes, y a “media de la tabla de IGI”.

En base al PBI regional, las inversiones mínimas, para estar presentes en la fotografía del futuro, y tendrían que invertirse anualmente, serían en la región Tacna S/. 49.5 millones de soles/anuales; Moquegua 54.4 millones de soles/año, conforme a la siguiente tabla (Ver)

El camino de la cuarta revolución industrial, está en marcha, hay que incorporarse para lograr la mejora de los estilos de vida, el Desarrollo económico y Progreso Social largamente esperado.

NOTA: Al 2018, el Perú invirtió en Ciencia Tecnología e Innovación 0.12 del PBI, debe mejorar y elevarse para estar en la fotografía del futuro cercano.

Análisis & Opinión