La Contraloría General de la República alertó deficiencias en el control de calidad del agua potable que abastece a la ciudad de Moquegua, así como riesgos en la gestión de los recursos hídricos destinados a la agricultura. Tres informes de control simultáneo, emitidos entre noviembre y diciembre de 2025, advierten que los procedimientos actualmente utilizados no garantizan la confiabilidad de los resultados sobre la presencia de metales ni la adecuada desinfección del agua.
En comunicado de prensa señaló que, de acuerdo con el Informe de Visita de Control n.° 013-2025-OCI/4553-SVC (periodo del 1 al 5 de diciembre de 2025), para medir el nivel de arsénico en el agua de consumo humano el laboratorio de la EPS Moquegua emplea un kit de tiras reactivas basado en la comparación visual de colores. Este método no asegura la precisión técnica requerida ni cumple con lo establecido en la Norma Técnica Peruana (NTP) 214.008:2022, aprobada por el Instituto Nacional de la Calidad (INACAL), la cual exige el uso de procedimientos químicos rigurosos para la detección de este metal tóxico.
Asimismo, se identificó que la EPS utiliza un equipo multiparámetro nuevo para medir pH, conductividad y salinidad que no cuenta con un certificado de calibración vigente, bajo el argumento de que posee garantía de fábrica. No obstante, dicha garantía no reemplaza la validación técnica obligatoria exigida por la normativa.
Por su parte, el Informe de Visita de Control n° 012-2025-OCI/4553-SVC (periodo del 31 de octubre al 6 de noviembre de 2025), referido a la desinfección del agua potable, detectó discrepancias en los resultados de cloro libre de una misma muestra (1,66 mg/L frente a 1,86 mg/L) al compararse dos equipos, uno de los cuales carecía de etiqueta de calibración. Además, se alertó que las muestras tomadas durante los fines de semana demoran hasta 48 horas en ser analizadas, superando los tiempos máximos establecidos por la normativa y poniendo en riesgo la veracidad de los resultados.
De otro lado, el Informe de Visita de Control n° 018-2025-OCI/5740-SVC (periodo del 6 al 14 de noviembre de 2025) y dirigido a la Administración Local de Agua (ALA) Moquegua, advierte que en la parte baja del río Moquegua —después de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) Omo— persisten niveles de coliformes termotolerantes, boro y manganeso que superan los Estándares de Calidad Ambiental (ECA) para riego de vegetales y bebida de animales, lo que afecta la producción agrícola local.
Finalmente, la comisión de control constató que 35 equipos de alta tecnología —sensores, monitores y prismas— entregados por la Autoridad Nacional del Agua al Proyecto Especial Regional Pasto Grande para automatizar el envío de datos de la represa se encuentran instalados, pero inoperativos desde hace más de un año. Esta situación impide el monitoreo en tiempo real de la seguridad de la presa y del volumen de agua almacenada.
Los tres informes de visita de control fueron notificados a los titulares de la EPS Moquegua y de la ALA Moquegua para que adopten de inmediato las acciones correctivas correspondientes. Asimismo, se encuentran publicados en el Buscador de Informes de Servicios de Control, de libre acceso a la ciudadanía.
DATO
El informe cita reportes de la Dirección Regional de Salud (DIRESA) de 2024, los cuales revelan que más del 80 % de las personas tamizadas en diversos distritos de la región presentaron presencia de arsénico en la orina, situación que exige reforzar con urgencia los controles de calidad del agua.

