POR: MG. ROCIÓ CORNELIO AIRA
VIOLENCIA DE GÉNERO EN MOQUEGUA
En la región de Moquegua, la prevalencia de la violencia de género es alarmante. Se ha determinado que el 60,8% de las mujeres, entre los 15 y 49 años, que alguna vez estuvieron en una relación, han experimentado algún tipo de agresión por parte de su pareja.
Estas cifras, proporcionadas por la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar, ENDES – INEI en 2022, superan el promedio nacional, que es del 55,7%.
Estas estadísticas reflejan la necesidad urgente de abordar y prevenir la violencia hacia las mujeres en la región.
VIOLENCIA DE GÉNERO EN AREQUIPA
Similarmente, en la región de Arequipa, el escenario no es menos preocupante. Se ha registrado que el 59% de las mujeres, en el rango de edad de 15 a 49 años, que han tenido una relación, han sido víctimas de algún tipo de violencia por parte de su pareja.
Aunque este porcentaje es ligeramente menor al de Moquegua, sigue siendo mayor que el promedio nacional del 55,7%, también proporcionado por el ENDES-INEI en 2022.
Estas cifras subrayan la importancia de implementar medidas de prevención y protección para las mujeres en Arequipa y en todo el país.»
EMBARAZO ADOLESCENTE EN AREQUIPA
Dentro de la región de Arequipa, existe una preocupación creciente sobre la incidencia del embarazo en adolescentes.
De acuerdo con los datos recopilados por ENDES-INEI en 2022, se ha identificado que el 3.6% de las jóvenes entre las edades de 15 y 19 años ya han sido madres o han experimentado su primer embarazo.
Aunque esta cifra es significativamente menor al promedio nacional, que se encuentra en 9.2%, resalta la necesidad de seguir trabajando en programas de educación y prevención en la región.
EMBARAZO ADOLESCENTE EN MOQUEGUA
En contraste, la situación en la región de Moquegua muestra una tasa más elevada en relación al embarazo adolescente.
El estudio de ENDES-INEI de 2022 indica que el 7.5% de las adolescentes de 15 a 19 años en Moquegua han tenido al menos un hijo o han atravesado por su primer embarazo.
Aunque esta cifra es menor al promedio nacional de 9.2%, sigue siendo esencial fortalecer las medidas de prevención y educación para reducir aún más estos porcentajes y garantizar un futuro más prometedor para las jóvenes de la región.