POR: MIGUEL ARTURO SEMINARIO OJEDA (DIRECTOR DEL MUSEO ELECTORAL Y DE LA DEMOCRACIA DEL JURADO NACIONAL DE ELECCIONES)
Hoy 22 de septiembre se conmemora el nonagésimo aniversario de la instalación del Jurado Nacional de Elecciones, máximo organismo electoral del país, que comenzó a funcionar, el 22 de setiembre de 1931.
Si bien el Jurado Nacional de Elecciones fue creado por Decreto Ley 7177 del 26 de mayo de 1931, recién empieza a funcionar en 22 de setiembre de ese año, instalándose ese día, en el local del Senado, actual Museo del Congreso y de la Inquisición.
La instalación del Jurado Nacional de Elecciones, requería del trabajo previo de las Juntas Preparatorias mandadas por el Decreto Ley 7289 del 28 de agosto de 1931, que dispuso su funcionamiento “Con asistencia de por lo menos dos de los delegados de las universidades, y la citación al 5to día de aquella, a sesión pública de los partidos debidamente acreditados para verificar el sorteo de los miembros, que saldrían de entre los delegados departamentales.
A la Primera Junta Preparatoria del 7 de setiembre de 1931, presidida por el Dr. Ernesto Araujo Álvarez asistió el Dr. Max Gonzáles Olaechea por la Universidad de Arequipa, y el Dr. Leandro Pareja, por la Universidad de Cuzco; conforme a la Ley la Universidad de la Libertad designó al Dr. Ricardo Rivadeneira y la Universidad de San Marcos al Dr. Jorge Basadre, reemplazado por el Dr. Enrique Arnáez Naveda, por su viaje a los EEUU.
Sucesivamente los Presidentes de los Jurados Departamentales nombraron a sus delegados correspondiendo a la Provincia Litoral de Moquegua la figura del doctor Ernesto Flores. El Jurado Electoral de Moquegua estaba presidido por Carlos A. Gómez, y lo integraron también Augusto Chocano y J. Cánepa.
El 15 de setiembre, por sorteo se eligió entre los delegados departamentales, a los cuatro que integraron el Jurado Nacional de Elecciones, quedando en la conformación, Ernesto Flores, representante de Moquegua, quien asistió como Miembro al acto de instalación del JNE.
INSTALACIÓN DEL JNE
Concluidas las Juntas Preparatorias, el Jurado Nacional de Elecciones se instaló el martes 22 de setiembre de 1931, en sesión presidida por el Dr. Ernesto Araujo Álvarez, su primer presidente, con asistencia de los delegados Gonzáles Olaechea, Pareja, Rivadeneira, Flores, Garrido Lecca y Hurtado, los representantes de las universidades de Arequipa, Cusco y Trujillo y de los representantes de los Jurados Departamentales de la República.
Una de sus primeras tareas fue el registro de los partidos políticos, Partido Coalición Nacional, Partido Unión Revolucionaria y el Partido Laborista del Perú, comenzaba así el trabajo del Jurado Nacional de Elecciones como garante de la voluntad popular. Asimismo, se aprobó la inscripción de Luis M. Sánchez Cerro, y de Víctor Raúl Haya de la Torre como candidatos a la Presidencia de la Republica.
Cada candidato presentó modelos de cédulas de sufragio, aprobadas progresivamente, pese a que en varios países ya se había establecido el uso de papeletas iguales y hechas de manera oficial, con los nombres de los candidatos impresos, el uso de un solo color uniforme evitaba que los sufragantes fueran coaccionados por el candidato; el primer país con esta práctica fue Australia. Se hicieron sobres para el “Voto Secreto”; cartelones de difusión de las elecciones próximas, ánforas, sellos, mesas, casetas y publicaciones en periódicos.
De esta manera, el Jurado Nacional de Elecciones surge en la vida nacional como la institución garante de la voluntad popular; a partir de entonces, el voto es secreto y obligatorio para los varones alfabetos mayores de 21 años. El Estatuto de 1931 excluyó a los analfabetos, en un país donde urgía capacitar a los iletrados mayores de edad para su participación en la vida ciudadana.
Para facilitar el acto del sufragio, el JNE, a través de los diarios instruyó a los ciudadanos en el manejo del voto secreto. Manuel Vicente Villarán abogaba por la alfabetización de los iletrados, para no privar al indio de su representación política. En este proceso electoral, al lado de la prensa escrita, se utilizó la radio, para enviar mensajes a la población.
Para Sinesio López, el Estatuto Electoral de 1931 que creó el JNE, fue una norma innovadora en el Sistema Electoral, al considerarse la creación de un organismo electoral autónomo, el voto secreto y obligatorio, la representación de las minorías y la tecnificación del Registro Electoral.
El ciudadano común tuvo que ajustarse a la nueva realidad fomentada por el Jurado Nacional de Elecciones a partir de la legislación vigente, como la existencia de la libreta electoral, y sobre el voto secreto propiciado por intelectuales como Manuel Vicente Villarán, que sin ser miembro de la Comisión que redactó, el Estatuto Electoral, tuvo un comentario de opinión bastante aceptado.
El JNE es un organismo constitucionalmente autónomo con competencias a nivel nacional. Su máxima autoridad es el Pleno, que está integrado por cinco miembros elegidos en diferentes instancias: uno por la Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia de la República (quien lo preside); uno por la Junta de Fiscales Supremos, uno por el Colegio de Abogados de Lima, uno por los Decanos de las Facultades de Derecho de las Universidades Públicas y uno por los Decanos de las Facultades de Derecho de las Universidades Privadas.
La conformación colegiada y la forma de elección del Pleno garantizan la independencia e imparcialidad en la toma de decisiones de cada uno de sus miembros. De esta manera, el Jurado Nacional de Elecciones, se ha posicionado frente a la opinión pública, como un organismo respetuoso de la voluntad popular.
Este máximo organismo electoral, actualmente presidido por el doctor Jorge Luis Salas Arenas, tiene la misión de «Contribuir y garantizar la consolidación del sistema democrático y de la gobernabilidad del país, a través de sus funciones constitucionales y legales». Y su proyección a futuro se relaciona con, «Contribuir a la consolidación del sistema democrático, garantizando los derechos políticos de la ciudadanía, a través de la administración de justicia electoral, fiscalización, custodia y registro de organizaciones políticas y de otras funciones legales, con transparencia e imparcialidad.»
En este nonagésimo aniversario, al rememorar la fecha de instalación del máximo organismo electoral, a nivel regional recordemos la figura de Ernesto Flores, representante por Moquegua, miembro del primer pleno del Jurado Nacional de Elecciones.