POR: MIGUEL ARTURO SEMINARIO OJEDA (DIRECTOR DEL MUSEO ELECTORAL Y DE LA DEMOCRACIA DEL JURADO NACIONAL DE ELECCIONES)
El nacimiento de Víctor Mario Rafael Andrés Belaúnde Diez-Canseco, fue en Arequipa el 15 de diciembre de 1883, un poco después de la finalización de la guerra entre Perú y Chile. Fue hijo de Mariano Belaúnde de la Torre y de Mercedes Diez-Canseco Vargas. Se le considera uno de los representantes de la «Generación del 900», en la que destacan con él, Francisco García Calderón Rey y José de la Riva-Agüero y Osma.
Este ilustre peruano, es trascendente en parte, por sus reflexiones sobre la sociedad peruana, vivió en una época en que sus contemporáneos José Carlos Mariátegui y Víctor Raúl Haya de la Torre, también reflexionaron sobre la realidad del país, y las causas de los problemas económico sociales, aunque sin concordar en sus interpretaciones; antes bien hubo marcadas contradicciones, en la manera de entender la dinámica de la sociedad, y entender el presente, ligándolo al pasado.
Se recuerda a Víctor Andrés Belaunde por ocupar el más alto cargo en la Asamblea General de las Naciones Unidas, lo que llenó de orgullo a los peruanos. El laureado escritor se formó en las Universidades Nacional de San Agustín de Arequipa, y Universidad Nacional Mayor de San Marcos, donde ejerció la docencia universitaria, y en la que se graduó de doctor en Jurisprudencia, en Ciencias Políticas, y en Letras.
En 1903, fue secretario del Archivo de Límites del Ministerio de Relaciones Exteriores y, de 1905 a 1906, secretario de la misión que hizo la defensa del Perú en el litigio de límites con Bolivia, lo que le llevó a España en busca de información para mayor defensa de la causa del Perú. Las publicaciones hechas en este sentido, condensan testimonios del pasado del sur peruano.
Entre 1907 y 1911 fue jefe de la División de Límites en el Ministerio de Relaciones Exteriores; estuvo luego en la legación peruana en Alemania y en Bolivia. Poco después, en 1918 fundó el tercer «Mercurio Peruano», dirigiendo esta revista hasta 1932. En 1931, representando a Arequipa, fue elegido diputado al Congreso Constituyente, en el primer proceso electoral liderado por el Jurado Nacional de Elecciones.
Asesinado el presidente Sánchez Cerro, y cuando gobernaba don Oscar R Benavides, entró al servicio diplomático, como ministro plenipotenciario en Colombia, entre 1934 y 1935, y luego en Suiza (1936-1939). Por su eficiente desempeño fue luego embajador especial en las Naciones Unidas. Conformaría luego, en 1934, la delegación peruana que negoció la solución del conflicto con Colombia.
Nuevos cargos tuvieron que ver con su bien ganado prestigio, en 1945 presidió la delegación peruana en las Naciones Unidas, presidiendo este organismo entre 1959 y 1960. Había sido previamente Ministro de Relaciones Exteriores del Perú, durante el primer gobierno de Manuel Prado.
La muerte de Víctor Andrés Belaunde casi coincidió con su cumpleaños, pues falleció el 14 de diciembre de 1966 en Nueva York, prácticamente a los 83 años de edad, hace 55 años. Había sido militante de Acción Popular, partido fundado por su sobrino Fernando Belaunde Terry, llegando a ver el triunfo presidencial de ese partido.
Para Víctor Andrés Belaunde, el Perú era una síntesis viviente en la que la cultura andina y la occidental española tenían fuerte peso, creía en el mestizaje y valoraba el aporte nativo, para él no contaban los antagonismos de oponer a los descendientes biológicos y culturales de los cinco grandes grupos humanos que finalmente han conformado y le han dado sentido a la sociedad peruana.
Víctor Andrés Belaunde legó para el Perú una serie de publicaciones, entre libros y artículos, y quizá Peruanidad, libro publicado en 1942, es el más conocido y leído. Previamente había publicado El Perú antiguo y los modernos sociólogos, Ensayos de psicología nacional, Meditaciones peruanas, y La realidad nacional.
Tras Peruanidad, vendrían, La síntesis viviente, y el planteamiento del problema nacional, por mencionar algunos títulos. Se presume que su libro Realidad Nacional, fue una controversia con los 7 Ensayos de interpretación de la realidad peruana, publicados por el moqueguano José Carlos Mariátegui.