Siempre he dicho que las informaciones periodísticas en general deben contener primordialmente lo esencial en favor de las personas que lo necesiten y de materia especial a las más vulnerables o de pocos recursos económicos.
Por ejemplo, hoy me voy a ocupar del terrible cáncer; dejando aclarado que no soy médico especialista, sino que he encontrado un archivo personal, un artículo sobre este tema que puede servir en algo a los que sufren esta enfermedad.
El articulo salió en abril del 2018 en la revista regional Entérese de Arequipa y textualmente dice lo siguiente:
“Sacerdote franciscano cura el cáncer. Una sencilla receta basándose en sábila (aloe), preparada por un sacerdote franciscano que no se opone a revelarla, cura el cáncer y otras enfermedades”.
“Remedio natural contra el cáncer.
Queridos amigos, amigos hermanos y hermanas:
Lo que van a leer a continuación, salió publicado en el periódico de Listin Diario, de Santo Domingo (República Dominicana). En verdad les digo que al leerlo no creía mucho.
Este remedio se le debe al fraile franciscano que llaman en Belén, fray Romano, de origen brasileño. Actual maestro del seminario de Belén. Su fama a través de toda Judea, se va extendiendo y como se expresa:
‘Yo curo el cáncer y cualquiera puede hacerlo, sin hacer milagros, simplemente aplicando los productos que produce la madre naturaleza’.
Antes de darles la receta, quiero decirles mi experiencia personal.
Tengo conocimiento de varias personas que se han curado, después de beber el rebaje, a las cuales les daban menos de un mes de vida, por el padecimiento de diferentes tipos de cáncer terminales. Luego del conocimiento de las virtudes de este medicamento totalmente natural, me he propuesto hacerlo circular, por esta vía, para cualquier persona que tenga un amigo o pariente relacionado con esta terrible enfermedad, prepare esta receta y se lo dé a tomar, ya verán el resultado a la semana de estar tomándolo, se los aseguro que es algo milagroso que trabaja rápidamente.
La RECETA es:
½ kilo o litro de miel pura de abeja.
Dos hojas grandes o tres pequeñas de la planta llamada sábila (en otros países de le conoce como aloe)
Tres cucharadas de coñac, whisky, tequila o aguardiente (esto se usa como vaso dilatador).
Se le quita el polvo y las espinas de la hoja de sábila (aloe), se cortan estas en pequeños trozos, luego se introduce todos los elementos, antes citados en una batidora eléctrica o licuadora. Se bate hasta que se vea que se forma una pasta viscosa.
Ya está lista para tomar.
Se puede dejar afuera de la nevera o ponerse al refrigerador. Al gusto de cada cual. No debe quitarse la cáscara a la sábila (aloe) ni colar el remedio”.
Finalmente, manifiesto que mi único ánimo de trasmitir esta información, es que actualmente existen muchos casos; pero también muchos tienen miedo de ir al hospital y otros que no tienen recursos económicos para tratarse. Lo dejo todo para su amplio criterio.