La regidora Rossmery Villegas Huamán, aseguró no haber cometido ninguna falta durante la sesión de concejo de la Municipalidad Provincial de Mariscal Nieto, aclarando que su retiro se produjo durante un cuarto intermedio para dirigirse a EsSalud. Villegas aseguró que puede probar su versión con constancias de atención y certificados médicos.

La regidora señaló que algunas personas, a quienes no les agrada, ya planeaban solicitar su suspensión. Si bien reconoce que cualquier ciudadano tiene derecho a solicitar su vacancia a través del conducto regular, sostiene que las acusaciones en su contra carecen de fundamento.

«No hay una acusación directa, solo se aduce que las firmas en los certificados son diferentes. Creo que debería emitirse una solicitud a EsSalud para verificar si la información es veraz antes de verter acusaciones sin pruebas», indicó.

Villegas también mencionó que se sometió a un examen de alcoholemia a primera hora al día siguiente, el cual resultó negativo, y subrayó que nadie presentó una denuncia formal sobre el supuesto estado de ebriedad con el que habría asistido a la municipalidad.

“El día de la sesión, estaba con gripe, un cuadro de alergia y luego sinusitis, lo que provocó la obstrucción de mis vías respiratorias. Estaba mal, por eso usé mascarilla y, durante el cuarto intermedio, decidí retirarme. Han hecho un escándalo de algo inexistente, todo eran suposiciones. Nadie tuvo el valor de poner la denuncia como corresponde para que la Fiscalía intervenga”, concluyó la regidora.