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18 septiembre, 2024 6:11 pm

Reconciliación nacional, propone el ex premier Jorge del Castillo

En la siguiente entrevista con Jorge del Castillo, el expremier plantea como un punto de partida la muerte de Alberto Fujimori para promover un proceso de reconciliación nacional en el Perú. Del Castillo aboga por reducir la polarización política y social, y por fomentar el respeto entre los diversos actores, sin que su propuesta implique una alianza política o la búsqueda de un candidato.

¿Qué propone Jorge del Castillo tras la muerte de Alberto Fujimori?

Se propone aprovechar la muerte de Alberto Fujimori como una oportunidad para abrir un espacio de reconciliación entre los peruanos. La propuesta no busca formar una alianza política ni promover a un candidato, sino fomentar el entendimiento entre la población, reduciendo la polarización y la confrontación que existen en el país. La reconciliación no es una alianza política ni la búsqueda de un candidato, sino una forma de lograr que los peruanos convivan de manera más armoniosa, respetando las diferencias y opiniones, pero con serenidad y sin confrontaciones extremas.

¿Qué pasos se han dado para llevar a cabo esta propuesta?

Se ha tomado la iniciativa de invitar a diversas personas, personalidades y partidos políticos para dialogar sobre la reconciliación. Se han recibido respuestas positivas y se espera que la próxima semana se pueda tener una reunión objetiva para tratar este tema.

¿Quiénes serían los participantes en este proceso de reconciliación?

Los participantes en este proceso no se limitarían únicamente a los partidos políticos. Aunque es importante la participación de representantes de partidos, también se considera que muchos sectores representativos de la sociedad civil deberían tener una voz en este diálogo.

¿El Acuerdo Nacional sería un marco adecuado para esta propuesta?

El Acuerdo Nacional, que ayudé a fundar, podría ser un marco adecuado. Sin embargo, ha estado inactivo en el último tiempo bajo el gobierno de Dina Boluarte. Además, el Acuerdo Nacional limita la representación a partidos con bancadas parlamentarias, lo que excluye a muchos otros actores políticos.

¿Qué ejemplos de diálogo conoce usted?

Un diálogo reciente entre la Federación de Construcción Civil y la Cámara Peruana de la Construcción, auspiciado por Naciones Unidas. Este diálogo, que lleva más de 20 años, ha permitido evitar conflictos en el sector construcción. Se espera que esta propuesta de reconciliación pueda funcionar de manera similar. El respeto es fundamental en el proceso de reconciliación. El respeto debe comenzar por el lenguaje que se utiliza en el debate público, ya que las confrontaciones verbales extremas solo alimentan la polarización. Es importante mantener un discurso respetuoso para avanzar en el entendimiento.

¿Qué obstáculos podrían generarse para la reconciliación nacional?

La reconciliación no será posible mientras haya políticos que capitalicen el resentimiento y que, además, le echen «combustible» a ese resentimiento. Para que la reconciliación funcione, es necesario que estos actores se sienten a dialogar con un objetivo común: el Perú. La reconciliación es un proceso que debe construirse paso a paso. El respeto por las opiniones de los demás es fundamental, y no debe haber exclusiones. Es un proceso gradual que debe ser inclusivo y que, con el tiempo, puede formalizarse y expandirse.

¿Cómo describe el contexto político y social actual en Perú?

Está muy polarizado y fragmentado, con confrontaciones extremas, tanto verbales como físicas. Este es un momento oportuno para buscar una reconciliación que permita a los peruanos convivir con respeto y serenidad, a pesar de sus diferencias. Debe ser inclusivo y holístico. El objetivo no es gremial o partidario, sino buscar un nivel de entendimiento razonable y respetuoso entre los diversos actores políticos y sociales del país, en beneficio de toda la nación.

¿Qué relación tiene esta propuesta con la Comisión de la Verdad y Reconciliación?

Aunque la Comisión de la Verdad incluyó la palabra «reconciliación» en su nombre, la parte de la reconciliación quedó incompleta o en el aire. Esta propuesta busca retomar esa idea, pero con un enfoque más amplio y aplicable a la situación política y social actual.

Análisis & Opinión