El Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), entidad adscrita al Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), exhortó a la población —especialmente a los pescadores artesanales del litoral peruano— a adoptar medidas preventivas para reducir el contacto con lobos marinos y evitar conflictos con esta especie protegida.
Entre las recomendaciones destacan no alimentarlos ni arrojar al mar los despojos de las faenas pesqueras, así como implementar cercos o barreras en zonas portuarias para impedir que estos mamíferos se acerquen a las embarcaciones, donde suelen descansar.
“Los lobos marinos están en su hábitat natural. No obstante, se puede coexistir de manera armoniosa si es que respetamos sus espacios y tomamos medidas para reducir el contacto al mínimo. Recordemos que estos mamíferos marinos son parte del ecosistema y contribuyen a regular el equilibrio ecológico donde están presentes”, afirmó Alberto Yataco, administrador técnico del Serfor en Ica.
Respecto al caso ocurrido en Ica en febrero de 2025, el Serfor participó en una Mesa de Trabajo junto a instituciones como el Sernanp, el Gobierno Regional de Ica, la Capitanía del Puerto de Pisco, la Asociación de Pescadores Artesanales de San Andrés y otras entidades públicas y privadas.
Durante la reunión, se acordaron medidas de manejo y convivencia que protejan tanto a los pescadores como a los lobos marinos, priorizando la seguridad y la conservación de la especie.
SANA CONVIVENCIA
De cara al verano, el Serfor recordó que, si se observa un lobo marino en la playa, lo recomendable es mantener distancia y evitar que personas o mascotas se acerquen. No deben ser tocados, alimentados, ni devueltos al mar, ya que ello puede causarles estrés y poner en riesgo su supervivencia.
En el caso de las crías, que dependen de la leche materna hasta los diez meses, se pide no intervenir, pues la madre podría alejarse si percibe presencia humana.
El organismo también advirtió que estos animales pueden transmitir enfermedades zoonóticas como rabia, tuberculosis, leptospirosis o dermatitis por hongos, por lo que el contacto directo representa un riesgo para la salud pública.
LOBOS MARINOS EN EL PERÚ
En el país habitan dos especies: el lobo chusco (Otaria flavescens) y el lobo fino (Arctocephalus australis), este último el más común en las costas peruanas, con un peso promedio de 180 a 200 kilos.
La temporada de nacimientos se extiende de diciembre a febrero, por lo que el Serfor instó a extremar las precauciones durante estos meses, cuando las crías suelen permanecer en zonas de descanso cercanas a las playas.

