El Gobierno prorrogó por 60 días más el estado de emergencia en los distritos de las provincias de Mariscal Nieto y General Sánchez Cerro, afectados por la contaminación de las aguas del río Coralaque. Así lo informó el gerente regional de Gestión del Riesgo de Desastres del Gobierno Regional de Moquegua (GORE), Ing. Richard Benavente, quien precisó que la medida fue oficializada mediante un acto resolutivo emitido el 27 de octubre.
“Nosotros teníamos una declaratoria de emergencia que vencía el día de ayer, 27 de octubre. Conocedores del plazo, elaboramos y sustentamos la prórroga ante el INDECI, adjuntando toda la información técnica requerida. Finalmente, el día de ayer (lunes) ha salido el acto resolutivo que declara la ampliación por 60 días más”, explicó el funcionario.
Benavente señaló que esta prórroga favorece la continuidad de las acciones de atención que ya se venían ejecutando con distintos sectores, como Agricultura, Vivienda y Salud. “Se ha enviado al Ministerio de Vivienda la información de la población afectada, el número de familias e instituciones públicas. Entendemos que el ministerio está adquiriendo kits de filtros de agua y plantas de tratamiento que serán entregados a la población. Nosotros también hemos elaborado fichas complementarias para atender a zonas donde el agua se encuentra contaminada”, indicó.
El funcionario añadió que desde la Gerencia Regional se viene trabajando además con Agricultura, a través de fichas para la adquisición de tuberías, mangueras y kits de alimento para el ganado, con el fin de mitigar los efectos de la contaminación. “Si no se daba la prórroga, se habría complicado la adquisición de estos insumos, pero ahora podremos continuar con el proceso y atender a la población”, sostuvo.
Respecto a las acciones de solución definitiva, Benavente informó que ya ha ingresado a campo la empresa encargada de realizar trabajos de remediación en las zonas afectadas por la actividad minera. “Entre los trabajos previstos están la separación de aguas y la construcción de una planta de tratamiento de las aguas contaminadas producto de la actividad minera de Florencia Tucari y la falta de un plan de cierre de mina”, explicó.
Sin embargo, advirtió que el problema no terminará en el corto plazo. “Estos sesenta días no significan que la situación se haya superado. El peligro persistirá mientras no se culmine el plan de cierre de minas. Por eso, consideramos que debería declararse una emergencia permanente, porque este problema no es momentáneo, sino constante”, enfatizó.

