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Producción: ¿inicio del declive?

POR: JORGE ACOSTA ZEVALLOS (ECONOMISTA CEO PILO)    

Ha sorprendido la decisión del Gobernador de Moquegua Zenón Cueva de remover del cargo de confianza de la Gerencia Regional de la Producción al Ing. Cesar Quispe por la razón que era uno de los pocos gerentes adheridos al movimiento FIRME, apoyado por el mejor aliado el sector pesquero artesanal y que tenía claridad de lo que se tenía que hacer en este sector.

Destacamos que en el plan de gobierno del FIRME se logró anotar ideas centrales de prospectiva de lo que debería hacer la Gerencia de la Producción que tienen dos grandes responsabilidades: el sector pesquero, el agroindustrial, medianas, pequeñas y micro empresas. Siendo antes una Dirección debía convertirse en una Gerencia para lograr dar el salto presupuestal, porque a decir verdades casi siempre estaba bien alicaída, de tal manera que trascienda en importancia al nivel de constituirse en unidad ejecutora.

Por otro lado, por principios y convicción era fundamental impulsar el desarrollo sustentable e inclusivo que no palabras huecas, sino que se traducen en fundamentos como la defensa de las cinco millas marinas, mejoramiento de la productividad de la micro y pequeñas empresas y eso pasaba por decisiones como: en el sector pesquero apostar por un nuevo desembarcadero en el norte de Ilo, la construcción del nuevo terminal de venta de pescado o pescadería (se tiene el terreno, proyectos y convenio con la MPI), impulsar la acuicultura efectiva y concreta y no como antes que se realizaron y no se sabe en donde están.

En sector agro-industria y Mypes: pelearse contra el centralismo del Ministerio de la Producción (MP) que concentra recursos, programas y proyectos, actualmente a través del ITP tienen dos proyectos para Moquegua: el del servicio tecnológico de la cadena productiva de uva, palta y orégano del sector agroindustrial  con 750 mil soles y el servicio de innovación tecnológica de la cadena productiva de productos hidrobiológicos con 2 millones de soles; además, fortalecer el COREMYPE con un plan estratégico financiado y sustentado (se cuenta con el documento), disminuir la informalidad, hacer cumplir las normas que señalan que las compras y proveedurías locales o regionales del sector público y privado no deberían ser no menos del 40% de las empresas locales; impulsar la creación de los Parques Industriales Tecno Ecológicos (PITEs), recrear los PROCOMPITE como programas de ayuda a las empresas que están mejorando su competitividad o sea a las que crecen y en lo administrativo el ascenso por méritos antes que por favores.

El listado es más amplio y eso es lo que venía haciendo el ex gerente de la Producción y sobre el cual se han pronunciado favorablemente principalmente los pescadores. La razón, la explicación o él porque es una incógnita (salvo alguna “chilla” y allí me quito el sombrero, pero no lo creemos).

Lo que, si es cierto y demostrable que el actual gobernante es un pequeño caudillo, no tiene equipo o ideólogos para su gestión, no se sabe que sueña o anhela, es un poco más o menos que su antecesor, no pinta, se pierde en la nubelosa de la improvisación. El nuevo gerente es un biólogo que ya estuvo antes en el cargo, poco hay que destacar, se le recuerda porque en su periodo se formaron grupos internos antagónicos y era de cierra puertas, quizás sea un buen administrador, pero es seguro que en política pesquera y microempresarial es candidato a nulo.

Nos preocupa que nuestro amigo Zenón decaiga, que su individualismo lo aleje de sus convicciones sociales. Hay de muchos que sobre el árbol caído están haciendo leña, que los sepultados voceros de la pesca indiscriminada revivan y ahora propongan “ventanas de penetración” y aticen la revocatoria que casi es imposible en grandes espacios, si funcionan en pueblos pequeños, salvo error u omisión.

Si hay algo de bueno hay que destacar del gobernador es que no está “todavía” involucrado en grandes escándalos de corrupción, rezamos para que no lo este, además “todavía” podría salvarse de la caída en la preferencia impulsando una política efectiva de reactivación económica con el inicio de la irrigación de Lomas de Ilo, un gasto fiscal eficiente y de masivo empleo, le transfieran del gobierno nacional los grandes proyectos, reactivar la integración social, sin ser pro ni anti minero sentarse en la mesa con los empresarios mineros, atraer otras inversiones e incidir en la responsabilidad social, fortalecer el sector salud, mejorar la educación inclusiva entre otros.

Pero, para que ello ocurra tiene que ponerse nuevamente el poncho de líder democrático de izquierda y con un partido que le de buenas ideas de gobierno y no sea una oficina de clientes de empleo.

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