Como resultado de la reciente asamblea popular realizada el último domingo en el parque san Francisco de Cocachacra, un grupo de pobladores acordaron dirigir un memorial al presidente Alan García en el cual le solicitan expresamente, la cancelación definitiva y retiro de la concesión del proyecto minero Tía María y La Tapada de la empresa Southern Peru.
DERECHOS FUNDAMENTALES
En el punto seis del extenso documento, sostienen como argumento que se ha afectado los derechos fundamentales de la población del Valle de Tambo sobre la paz, la tranquilidad y gozar de un medio ambiente equilibrado. No obstante indica el escrito que de ser necesario, recurrirán a la Comisión interamericana de Derechos Humanos de la OEA.
FIRMA DE ALCALDES
La población que asistió a la asamblea respaldó el documento el cual, se supo, será presentado para que puedan además firmarlo las autoridades de la provincia de Islay, dirigentes sociales, sindicales y otros, como apoyo a esta causa.
IMPRECISIONES
Cabe indicar que en desarrollo del documento se aprecian algunas imprecisiones. Por ejemplo, en el punto tres, si bien se hace una referencia al impacto en la colectividad por la presencia del proyecto Tía María, se presenta una lista de los fallecidos entre el 2011 y 2015, allí se indica que Carlos Rondón Rodríguez murió (como todos los de la lista) por impacto de bala, cuando eso no es cierto. El mencionado poblador falleció por cortes a la altura de la vena yugular y la policía lo mostró como un atropello en Chucarapi.
CUESTIONAMIENTOS
Asimismo cuestionan que la empresa minera vaya a cumplir con el plan de desalinización del agua de mar para su proyecto, ya que, indican en el memorial, que la salmuera tendrá efectos sobre la fauna y flora marina; a esto se suma las observaciones de la UNOPS, que aseguran, no fueron levantadas.
Movida elección del frente de defensa
En la asamblea también se procedió a la elección de una junta directiva que encabezará lo que han denominado “Frente de Defensa del Valle de Tambo”, el cual velará por los derechos de la población de ese sector. En la reunión se procedió con propuestas y votación a mano alzada de los asistentes, que de acuerdo a la cifra de votos, habría sido en promedio 200 personas. A pesar de ello se logró elegir al poblador Elvis Apaza como presidente y a José Majo vicepresidente, entre otros miembros de la directiva.
En tanto un grupo de asistentes se mostraron en contra de la elección, indicando que no era la forma en la cual se había propuesto en principio la elección de una junta directiva para el frente; la cual, a decir del dirigente Miguel Meza, debía haber sido propuesta con dos pobladores de cada distrito del Valle de Tambo, algo que no se evidenció en la asamblea y la elección final fue llevada sin tomar en cuenta el acuerdo previo de una asamblea pasada.