Continúa la polémica en el pueblo joven Alto Inclán tras la instalación de una antena de telefonía móvil que ha generado el rechazo de los vecinos, quienes temen por posibles afectaciones a la salud debido a su cercanía con zonas habitadas.
El regidor provincial Rubén Flores informó que recibió el encargo de parte de la presidenta del consejo directivo del sector para atender este caso. Según indicó, se trata de una antena 5G, tecnología que —a su juicio— sería “100% contaminante”.
Flores cuestionó que, si bien la empresa contaría con autorización del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) desde Lima, no habría gestionado el permiso correspondiente ante la autoridad local.
“El alcalde de Mollendo es quien debe autorizar estas instalaciones en nuestra jurisdicción. Nosotros, como regidores, no nos oponemos al avance tecnológico, pero consideramos que estas estructuras deben colocarse en zonas que no representen un riesgo para la población”, expresó el concejal.