Por: Arnulfo Benavente Díaz
“Tempestad en los Andes”, es un libro de Luis Valcárcel, escribe con palabras proféticas: «La cultura bajará otra vez de los Andes». Es decir, el hombre del ande es un promotor de sus costumbres en la costa peruana. La gente del ande es inteligente y trabajadora; según Valcárcel: «Nos es sustancialmente inferior. Es tan sólo, muy distinta».
En las décadas del 60 y 70 ocupaban en la costa, labores de limpieza y jardinería, ahora los vemos en toda las profesiones y oficios, están incorporados en un mestizaje y apoyan a la producción y economía del país.
En estos tiempos, se sienten representados por la izquierda política, que puede llevarlos al éxito o al fracaso. La izquierda triunfadora de las elecciones del presente, arrolla con sus costumbres, a los que viven en el litoral.
Los criollos de la costa peruana tienen sus propios elementos culturales y no va con lo andino.
El significado de «criollo», según Sebastián Salazar Bondy, en su obra “El Fabricante de Deudas” dice «Su significado actual es limeño o costeño».
Antauro Humala escribió una tesis impresionante de 400 páginas: “Etnonacionalismo”. Sostiene que el continente llamado América debe llevar el nombre de la etnia originaria:»Abya Yala» y espera: «La reunificación de las actuales poblaciones de la estirpe cobriza».
Pensamos que el andino debe adoptar las costumbres y tradiciones de la costa, así como el costeño respeta el mundo de los apus, cuando viaja al interior.