Una familia salva de morir aplastada, luego que un muro se derrumbara sobre su vivienda rústica en la asociación Jesús de Nazareth del distrito de San Antonio cerca del grifo municipal que alquila Margarita Vargas junto a su esposo e hijos.
El lamentable hecho ocurrió la mañana de hoy lunes, cuando se encontraban tomando desayuno, fue entonces que se sintió un fuerte ruido y cayó la pared sobre el techo de calamina del módulo.
Los escombros cayeron sobre el dormitorio, obligando a que los ocupantes salieran raudamente a la calle, poniéndose a buen recaudo.
Inmediatamente fueron a decirle al maquinista que hacía trabajos en el terreno continuo para que detenga sus labores.
Hay que indicar que en la casa contigua se vienen realizando trabajos de construcción de manera particular y no habría tomado las respectivas medidas de precaución.
Dos menores de 9 y 7 años resultaron con algunos rasguños y golpes leves, siendo llevados a la posta del lugar para su atención.
Según la Sra. Margarita, no tienen donde pasar la noche por que las habitaciones afectadas es el dormitorio y la cocina, además la infraestructura ha quedado deteriorada.
Por su parte el esposo, José Sonco, indicó que se ha dañado camas, colchones, ropero, un televisor, la cocina, mesas, utensilios, entre otros, por lo que piden a las autoridades y a los dueños de la obra, que los ayuden para poder sacar los escombros, ya que el inmueble ha quedado prácticamente inhabitable.
La dueña de la obra, culpó al maquinista, señalado que ha sido una imprudencia, comprometiéndose a remediar los daños ocasionados.