La candidata a la alcaldía provincial de Islay, por el partido Perú Libertario, Marilú Marroquín León, sostuvo que en sus planes destacan lineamientos en los que trabaja para conseguir el crecimiento de la provincia, que por muchos años no ha sido atendido por las autoridades de turno.
“Yo no estoy en campaña, yo estoy en lucha (…) Por más de veinte años el tema del ordenamiento y acondicionamiento territorial no ha sido resuelto. Hay que revisar los planes de acondicionamiento territorial (PAT) y de desarrollo urbano (PDU), pues se ha perdido 41.72 kilómetros cuadrados que están por las pampas de La Clemesí, en las caletas, y otras obedeciendo a inversiones como Southern, Samay, que no permiten un crecimiento ordenado, porque nunca hubo un plan de desarrollo concertado que resulta del PAT y PDU (…) las partes altas del valle de Tambo no pueden crecer ordenadamente porque están concesionadas a Southern. Allí podría desarrollarse la agroindustria, nuevas poblaciones, aeropuerto. Pero no se ha logrado nada de eso”
POLÍTICAS DE GOBIERNO LOCAL
En ese sentido subrayó que, si bien cuatro años no son suficientes para concretar estas propuestas, cabe establecer políticas de gobierno local que permitan darle continuidad a estas iniciativas enmarcadas en un plan de desarrollo concertado.
Una de esos planteamientos es emplear el agua del subsuelo netamente para el uso poblacional y reservarla. Cuestionó la existencia de las tuberías para el transporte de combustible que están en zonas de playas, las cuales (con las plantas PetroPerú y Monte Azul) tendrían que ser reubicadas para no desfigurar el entorno de las playas y desarrollar mejores atractivos turísticos.