El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y su gobierno se comprometieron «a hacer todo» para restaurar la democracia en Venezuela al recibir a líderes de la oposición venezolana y a representantes de Estados Unidos y la Organización de Estados Americanos (OEA).
El mandatario ultraderechista recibió en el Palacio de Planalto al presidente del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela en el exilio, Miguel Ángel Martín, un órgano nombrado por la mayoría opositora del Parlamento.
«Haremos todo para que la democracia en Venezuela sea restablecida y que ustedes (los venezolanos) puedan vivir en libertad […] Creo que la solución llegará en breve», declaró Bolsonaro.
En la reunión estuvieron presentes Gustavo Cinosi, asesor senior del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, así como el canciller brasileño, Ernesto Araújo.
Este último también tuvo una audiencia con otros líderes opositores, entre ellos Julio Borges, expresidente del Parlamento venezolano, exiliado en Colombia, y Antonio Ledezma, exalcalde de Caracas instalado en Madrid. Luego de la misma, se emitió un comunicado en que dio a entender que Brasil apoyaría la disposición a asumir «una presidencia interina» de Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional.
«Brasil hará todo para ayudar al pueblo venezolano a volver a vivir en libertad y a superar la catástrofe humanitaria que hoy atraviesa», declaró.
Como se recuerda, luego que Nicolás Maduro inició el pasado 10 de enero su segundo mandato, el cual ha sido desconocido por otros países y generó una serie de medidas de países en bloque. Esto incluso no ha sido reconocido por los opositores venezolanos, entre ellos de Juan Guaidó, quien se mostró dispuesto a liderar un gobierno de transición que llame a nuevas votaciones.
Antonio Ledezma pidió al mandatario brasileño que reconozca a Guaidó como presidente. «Pedimos que se reconozca no solo a la Asamblea Nacional y al Tribunal Supremo de Justicia en el exilio, sino que se sepa que Juan Guaidó es el presidente constitucional temporal de Venezuela», indicó.
Mientras que Julio Borges declaró que el gobierno de Maduro está «descalabrado» y explicó que los países podrían tomar medidas contra la administración venezolana que tienen que ver con «el blanqueo de capitales, la corrupción o la violación de los derechos humanos». (AFP)