La ampliación del malecón costero presenta serias deficiencias en su iluminación, situación que viene generando preocupación entre los vecinos de la zona. Así lo advirtió el presidente de la junta vecinal Villa del Mar, Daniel Fernández Pazos, quien señaló que las luminarias instaladas no son de buena calidad y, al ser solares, no brindan una iluminación adecuada.
Asimismo, cuestionó que los reflectores grandes, que funcionan con energía eléctrica, permanezcan apagados de manera constante, pese a que deberían estar encendidos para garantizar mayor seguridad.
El dirigente vecinal alertó que en las zonas con desniveles la oscuridad es mayor, lo que incrementa el riesgo para los transeúntes y podría facilitar actos delictivos. “En estas condiciones, las personas pueden ser víctimas de gente de mal vivir”, expresó.
A la deficiente iluminación se suma la falta de patrullaje y rondas tanto del personal de Serenazgo como de la Policía Nacional, lo que agrava la sensación de inseguridad en el lugar. “Ante la poca iluminación muchos vecinos prefieren no acudir al malecón, especialmente en horas de la noche, por temor a ser asaltados”.
Recordó que cuando la obra fue inaugurada el lugar se encontraba bien iluminado; sin embargo, con el paso de los días la situación ha cambiado y ya no ofrece las mismas condiciones de seguridad.
