Estaba cerca de cumplir 89 años, el próximo 30 de noviembre. Este jueves falleció don Jorge Zuzunaga Flórez en la ciudad de Mollendo. Su partida ha dejado un hondo pesar en la colectividad mollendina, al ser recordado como el primer alcalde de la provincia de Islay elegido por votación popular para el período comprendido entre 1967 y 1969. Sus restos fueron trasladados a la ciudad de Arequipa en donde fueron cremados, según su última voluntad.
Enrique Chávez Jara, historiador mollendino, destacó la vida de don Jorge Zuzunaga en el número 23, de la colección de “Alcaldes a través de la Historia de Mollendo” que se publicó por el Diario Prensa Regional el 15 de septiembre de 2018. A continuación un resumen, de la vida de Don Jorge Zuzunaga.
BIOGRAFÍA POR ENRIQUE CHÁVEZ JARA
Nació el 30 de noviembre en Mollendo, sus padres fueron don Hernán Leoncio Zuzunaga Zuzunaga, natural de Lima y de doña Alicia Dorila Flórez Zegarra una notable dama arequipeña. Vivió sus primeros años de la infancia en la calle Carlos Llosa.
Realizó sus primeros estudios en su natal Mollendo, habiendo egresado de las aulas del Colegio Nacional Deán Valdivia. Tenía 14 años cuando ya empezó a trabajar como empleado bancario. En 1948 cuando frisaba los 19 años llega a ser administrador de una empresa maderera de Mollendo, adquiriendo experiencia en los negocios, dedicando su vida al comercio y a la actividad política.
El joven Jorge a invitación del Dr. Héctor Cornejo Chávez y con apenas 26 años, pasa a integrar las filas del Movimiento Democrático Cristiano (luego será el Partido de la Democracia Cristiana). Ya en 1966 se divide este partido para dar lugar a la creación del Popular Cristiano, esta vez liderado por el Dr. Luis Bedoya Reyes, penosamente se aleja de estos movimientos políticos, pasando a ser un importante líder cívico de Mollendo.
Contrajo matrimonio con la señorita Rosa Elena Valdivia, teniendo siete hijos, Rosa, Alicia, Jorge, María Eugenia, Irene, Doris y Elena.
Don Jorge incursiona a la vida política de su pueblo, participando por primera vez en las elecciones democráticas municipales, e invitado por la Alianza AP-DC logra ganar las Elecciones Municipales 1967-1969 reemplazando al alcalde Aureliano Navarrete.
Mollendo por entonces, decía don José Delgado del Carpio: “cuenta con toda clase de instituciones, quizá tenemos muchas, pero todas ellas tienen un objetivo noble con elementos propios superándose constantemente. En este orden no caben exigencias porque socialmente se basa en la espontaneidad y en la buena voluntad, el comercio y la industria tienen personería como lo tienen los empleados y obreros; la sociedad culta y distinguida tiene su Club Social donde se lucen los exponentes de nuestro gran mundo, y si hemos oído algunas críticas es porque se espera de ellos muchos más; las instituciones laborales del puerto son respetadas, disfrutando un sitial de gran estima”. Era el Mollendo que le tocó vivir a don Jorge.
Asume la alcaldía provincial de Islay el 1 de enero de 1967 cuando contaba con 37 años junto a un grupo de distinguidos concejales. En un artículo escrito por don Jorge en la revista del Círculo Cultural Baca Flor en 1968 afirmaba: “Se encendió una nueva luz, el fantasma del nuevo puerto se fue alejando de la vista de los hijos de esta tierra, la amenaza de muerte a nuestro pueblo cayó abatida por el optimismo y la resolución de aquellos que nunca perdieron la fe en el porvenir de Mollendo, y aquí estamos festejando sus 97 años de vida”.
Una de las principales acciones que don Jorge deberá realizar es prepararse para la celebración del Centenario de la fundación ferroviaria de Mollendo, la de proseguir con el plan de integración de los distritos destinando fondos de la municipalidad para obras en los pueblos del Valle de Tambo que no cuentan con los medios de que ahora dispone Mollendo con su Ley del Centenario.
Mollendo no repetirá el error de las grandes ciudades de la Patria, se nos dio una ley especial que permite un plan de obras, nuestra ciudad no olvidará a los humildes pueblos que lo conforman. El año de 1968 Mollendo recibe con un plan de acción y desarrollo en plena ejecución y la meta, no de un solo período de gestión municipal sino para proseguirlo por quienes sucedan a esta comuna, debe ser: La construcción del Centro Cívico en la plaza Bolognesi que nos permitirá contar con un Teatro, el Palacio municipal, la Biblioteca Pública, la Casa de la Cultura, construcción del hotel de turistas, planta de tratamiento de agua, asfaltado y veredas, y la posibilidad de contar con la autorización legal de un casino.
Hombre de acción don Jorge Zuzunaga deja el cargo el 31 de diciembre de 1969, siendo designado alcalde por Resolución Ministerial el empresario aduanal Manuel Madalengoitia Moreno, quien solo permaneció del dos de enero de 1970 hasta el 18 de diciembre del mismo año.
Nuevamente asume la alcaldía provincial don Aureliano Navarrete Carmelino, nombrado por el Gobierno Revolucionario de Juan Velasco Alvarado, pese a las discrepancias don Jorge Zuzunaga logra integrar como presidente de la Junta Pro-celebración del Centenario de Mollendo. Fue el artífice para que esta fecha memorable en los anales de la vida republicana de la ciudad, sea la más esplendorosa, trabajó arduamente viajando constantemente a la capital y pese a enfrentarse a los inefables burócratas del gobierno militar, logró su propósito.
La actividad pública, empresarial (es Gerente de la firma comercial Jorge Zuzunaga Flórez S.A.) social y deportiva de don Jorge es manifiesta, ha sido presidente de la Sociedad de Beneficencia Pública de Mollendo, el Comité Provincial de Deportes, Club de Tiro Alfonso Ugarte, El Comité de Apoyo a la Guardia Civil, del Nacional FBC, Rotary Club Mollendo, así como el Club Social Mollendo.
Cuando contaba con 69 años, ya retirado de toda actividad pública y social escribe un libro titulado “El Holocausto Lento del Perú, Mensaje a la Nueva Generación”, editado en Arequipa por la Editora Dongo. Una obra que trata sobre la moralización, prioridades y desarrollo, los partidos políticos y democracia, privatizaciones, donde escribe sobre, a manera de mensaje, las desgracias, preocupaciones y la esperanza de todo el sufrido pueblo peruano.
Don Jorge atendía en su oficina de la calle Deán Valdivia Nº 515 frente a la iglesia de La Inmaculada, tal vez asuntos de trabajo o privados, una oficina apropiada para la conversa cotidiana con los amigos de siempre.
Finalmente, don Jorge dijo alguna vez: “Mollendo de un mañana más lejano, no es obra de un hombre, ni de un municipio, será el resultado del empeño de todos sus hijos, de aquellos que desde la función pública o privada están demostrando que saben trabajar y amar a su tierra y también de aquellos que, sin participar directa o públicamente en esta labor, alientan la nueva jornada que vive la ciudad con el apoyo de su opinión, aliento que empuja a las instituciones representativas de Mollendo a la acción”.