Se lava las manos. La CPC Solange Agramonte, gerente general de la Entidad Prestadora de Servicios (EPS) Ilo, evade asumir responsabilidad por la negligencia de su administración en las obras de alcantarillado en los sectores César Vallejo y Circunvalación Cuajone en Miramar. Agramonte se limita a informar que el proyecto ha quedado paralizado temporalmente debido al abandono del consorcio encargado.
Ante esta situación, la EPS Ilo ha tomado acciones, comunicando a los funcionarios correspondientes en Lima y presentando las denuncias pertinentes ante la Fiscalía. «Se están haciendo las coordinaciones para remitir la documentación a la Contraloría General de la República y al Organismo Supervisor de las Contrataciones del Estado (OSCE) para que se apliquen las sanciones correspondientes tras el proceso de investigación», expresó Agramonte.
La gerente general espera que la situación se resuelva lo antes posible, aunque reconoce que están sujetos a los plazos establecidos en la Ley de Contrataciones del Estado. El consentimiento de la resolución de declaratoria de nulidad del contrato tiene un plazo de 30 días hábiles.
EL PROYECTO
Tras lograr el financiamiento para la obra, la OTASS y la EPS Ilo, anunciaban que los pobladores de César Vallejo tendrían una mejor calidad de vida como resultado de la obra de renovación de redes de agua potable y alcantarillado, con más de 27 años de antigüedad, gracias a una transferencia de S/ 3.5 millones, en el marco del proceso de reflotamiento de la empresa, que se encuentra bajo el Régimen de Apoyo Transitorio (RAT) desde el 2016.
La obra arrancó el 18 de abril de este año y en la ceremonia estuvieron el alcalde de la Municipalidad Provincial de Ilo, Humberto Tapia, el director ejecutivo del #Otass, Luis Contreras; la gerenta general de la EPS Ilo, Solange Agramonte, junto a su plana gerencial, y la población beneficiada.
El Consorcio Constructor del Sur fue contratado por la Entidad Prestadora de Servicios (EPS) Ilo para llevar a cabo una obra con un plazo de ejecución de 150 días calendario, según el expediente técnico. Sin embargo, el consorcio no cumplió con el plazo establecido. La EPS Ilo, por su parte, no ha sido lo suficientemente exigente ni rigurosa en el seguimiento del proceso, lo que ha contribuido al incumplimiento de los términos acordados.
Se han señalado una serie de irregularidades durante el proceso de contratación que ahora salen a la luz. Entre ellas, la presentación de una carta fianza falsa por parte de la empresa contratada, emitida a nombre de una cooperativa cuya identidad aún no ha sido revelada. Este documento fue aceptado sin verificar su autenticidad por parte de la EPS Ilo.