Cuidar los riñones es fundamental para garantizar una vida saludable y de calidad. El especialista de la Unidad Básica de Hemodiálisis del Hospital Base II Moquegua del Seguro Social de Salud (EsSalud) advierte que la principal causa de daño renal crónico que lleva a los pacientes a requerir hemodiálisis es la diabetes mellitus, por lo que recomienda a la población reforzar la prevención y el control oportuno de esta enfermedad.
El médico nefrólogo Dr. William Pinto Samanez, coordinador de la Unidad de Hemodiálisis del Hospital Base II Moquegua, señaló que, entre los 62 pacientes atendidos en el servicio, la mayoría llegó a desarrollar Enfermedad Renal Crónica (ERC) como consecuencia de la diabetes mellitus. Otras causas identificadas fueron la hipertensión arterial, la uropatía obstructiva y diversas enfermedades autoinmunes.
El especialista enfatizó que tanto la diabetes como la hipertensión son enfermedades silenciosas que, si no se detectan ni controlan a tiempo, generan un deterioro progresivo de la función renal. “Cuando el daño renal es avanzado, el paciente requiere tratamiento sustitutivo como la hemodiálisis; por ello es fundamental la prevención y el diagnóstico temprano”, señaló.
Por su parte, el director de la Red Asistencial Moquegua, Dr. Edilberto Salazar Zender, resaltó el compromiso institucional por fortalecer la prevención de enfermedades crónicas, iniciativa que se enmarca en las prioridades establecidas por el presidente ejecutivo de EsSalud, Dr. Segundo Acho Mego.
“El presidente ejecutivo nos ha encargado reforzar el trabajo preventivo en la Red Moquegua, porque la salud renal empieza con hábitos saludables y controles periódicos. Como EsSalud, seguimos comprometidos con proteger la vida y el bienestar de cada asegurado”, afirmó el director.
Asimismo, el Dr. Salazar invitó a los asegurados a acudir a un chequeo médico oportuno ante cualquier sospecha de glucosa elevada o presión arterial alta, ya sea en consulta externa o en los consultorios de atención inmediata. Estos tamizajes permiten identificar a tiempo la diabetes o hipertensión y evitar complicaciones que pueden comprometer la función renal.

