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Escalonada de indignación y violencia tras vacancia de Martín Vizcarra

Tras la vacancia de Martín Vizcarra de la presidencia de la República, consumada por el Congreso de la República y tras la juramentación en el cargo como nuevo jefe de Estado de Manuel Merino, las manifestaciones de rechazo de desataron con mayor escala en Lima y algunas partes del país.

Ayer en la tarde, la Policía Nacional intervino con fuerza en la plaza San Martín y lanzando bombas lacrimógenas para dispersar a los manifestantes, que desde mañana estaban en la zona y reintentaron reunirse para protestar contra la determinación del Congreso y la juramentación de Merino.

Los manifestantes en su mayoría jóvenes con banderolas y carteles en mano, rechazan las acciones de los parlamentarios que destituyeron la noche del lunes a Vizcarra.

La situación se ha agudizado en el Centro de Lima se ha agudizado, donde se han producido violentos enfrentamientos entre la policía y los protestantes.

En Piura, Arequipa, Trujillo, Tacna, Chiclayo, Puno, Huancayo, Huancavelica y otras ciudades se realizaron grandes manifestaciones. En Cusco, la Policía tuvo que usar bombas lacrimógenas para dispersar a los manifestantes, quienes indican que seguirán protestando.

En Moquegua, la tierra del vacado expresidente la manifestación fue corta y poco más de un centenar de personas salió a protestar a las calles y dar su respaldo a Martín Vizcarra.

MARTÍN VIZCARRA: «UNA AUTORIDAD QUE NO TIENE LEGALIDAD DEFINIDA NI LEGITIMIDAD GENERA PREOCUPACIÓN»

El expresidente Martín Vizcarra se pronunció por la asunción de Manuel Merino, quien juró en el Congreso como nuevo presidente en medio de fuertes protestas en el centro de Lima y otras ciudades del país. Dijo que existe dos principios básicos para que una autoridad ejerza el poder: legalidad y legitimidad.

“Respecto a la juramentación del señor Merino manifestar, como ya lo he dicho, mi preocupación por el Perú. No lo desearía el mal a mi país, tengo una preocupación, como tienen miles de peruanos. Para poder ejercer su autoridad se necesitan dos principios básicos: necesitan legalidad y legitimidad. La legalidad está en tela en juicio porque el Tribunal Constitucional no se manifestó. Y la legitimidad, ¿quién la da? La legitimidad la da el pueblo. Entonces una autoridad que no tiene legalidad definida ni legitimidad de respaldo, entonces genera preocupación”, dijo.

El mandatario dijo que respeta las manifestaciones espontaneas que se están produciendo a lo largo del país. “Soy un peruano más y manifiesto un sentimiento de preocupación”, dijo.

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